Domingo 28 de octubre de 2012, Costa Rica

Obra de arte natural

Puerta celestial

Patricia Recio

arecio@aldia.co.cr

Una verdadera entrada al cielo es la que existe en la provincia de Hunan, en China.

Esta montaña es conocida por sus peculiares bosques de rocas de cuarcita, pero es la cueva Tianmendong el símbolo de la ciudad, con su imponente agujero alargado hacia arriba, de 131 metros altura y 57 metros de ancho y una profundidad de 60 metros.

Se dice que este imponente boquete se formó en el 263 dC.

Estas cifras posiblemente la ubiquen como la mayor entrada de una cueva en todo el mundo, según el sitio historiasinsolitas.com.

Debido a la pronunciada inclinación de la montaña de Tianmenshan, hay que subir una escalera de 999 peldaños para llegar al monumental agujero creado por la naturaleza.

El agujero es visible desde muchos kilómetros de distancia y hasta hace apenas una década este rincón del mundo no estaba abierto a las visitas extranjeras.

Entre 1998 y 2005 se construyó una serpenteada carretera que lleva a los visitantes casi hasta donde empiezan las escaleras, sin embargo está es cerrada durante los meses de invierno.

Para los que le tienen vértigo a las curvas hay un teleférico de más de siete kilómetros que funciona durante todo el año, según el sitio tejiendoelmundo.com.

El teleférico parte de la ciudad y se desplaza por 7,5 Km de fondos a unos 1.280 metros de altura.

En el lado occidental de la cima de la montaña se encuentra el recién construido templo de Tianmen con una superficie de 10 mil metros cuadrados.

Antes de que el nuevo templo fuera construido, había un templo más pequeño en el mismo lugar en el que los peregrinos budistas tenían adorado desde la dinastía Ming, hace 400 años.

Sabía qué

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