El sorteo de números bajos que realizará mañana la Junta de Protección Social (JPS) podría dejar de ser un plan piloto, pues los chanceros se muestran muy optimistas con las ventas.
Jorge Murillo, quien tiene 50 años de vender lotería, dijo ayer a las 11 a.m. en su puesto en la avenida central, que confía en que estos chances se venderán más porque al haber números bajos hay más oportunidad de pegar.
“Siempre los números bajos son más apetecidos”, manifestó Murillo, quien a manera de ejemplo citó que el domingo anterior salió el 21 en la lotería y el martes en los chances los cinco números premiados fueron menores al 49.
Luis Bonilla, trabajador de la Asamblea Legislativa, había recorrido todos los puestos y no conseguía el 49. Lo compra por ser el más alto y porque al sumar los tres números que salieron el martes (02, 42 y 05) da 49.
“Me parece que hay más oportunidad de ganar porque son los que salen más”, afirmó, tras pagar ¢5 mil por un entero.
El sorteo es de chances de números comprendidos del 00 al 49, cuyo premio mayor será de ¢50 millones por entero de 10 fracciones, (es decir ¢5 millones por pedacito) y de ¢12 millones el segundo (¢1,2 millones por fracción).
Además, quien tenga el mismo número del mayor pero con diferente serie recibirá ¢8.500 por fracción y si se trata del segundo número el premio será de ¢1.500.
Según la JPS, el sorteo se creó para satisfacer a los jugadores que prefieren comprar números bajos, y asegura que si este plan piloto resulta exitoso lo implementarám de forma permanente para los seguidores del juego.
