Ariana Vargas, ganadora en femenino de los 3.000 metros, no cumplió sola ayer. Su madre, Marianela Ruiz, también formó parte de los nadadores pero en la categoría de los 1.500 metros.
Vargas, quien tiene 18 años, estudia medicina en la Universidad de Costa Rica y tiene la gran ilusión: el próximo fin de semana de poder ganarse un puesto en la Selección Nacional de Aguas Abiertas. La competencia será en Playa Herradura.
Su madre, quien la acompañaba a los entrenamientos en Cartago, se contagió de su hija. “Pasaba una hora esperando, y un día dije, voy a aprender a nadar también”, comentó.
Ese fue el inicio. Ahora, tanto madre como hija llevan una vida bastante ajetreada, que incluye, en el caso de la mamá, trabajar como supervisora del Ministerio de Educación Pública de Enseñanza Especial en Cartago. Y por el lado de la hija, un intenso programa de estudios en medicina en la UCR.
“Me siento muy bien. Terminé la competencia y me siento como si no hubiera nadado. ¡Sí se puede!”, afirmó la madre.
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