La placentera etapa que encierra la luna de miel quedó en suspenso para el marchista Allan Segura al viajar ayer a Milán, Italia, para optar por su pase a los Juegos Olímpicos de Londres 2012, clasificación que de conseguirla también lo complacerá y la recordará como otra inolvidable etapa de su vida.
Allan, casado hace tres meses con Jackelin Arguedas, competirá el domingo en una prueba de 20 kilómetros con la idea de alcanzar la marca de una hora, 24 minutos y 30 segundos que lo convertiría en uno de los atletas costarricense con boleto a las Olimpiadas.
El marchista estuvo a principios de marzo a un minuto y seis segundos de conseguir el pase cuando, en una competencia celebrada en Chihuahua, México, donde cronometró una hora, 25 minutos y 36 segundos.
Segura, quien desde hace nueve años trabaja como supervisor de mantenimiento en el hospital San Juan de Dios, declaró ayer sentirse optimista.
Esperanzado
“Nada me garantiza que voy a ganar, pero tengo la confianza que sí se puede”, expresó el segundo de tres hermanos, hijos de Patricio Segura y Fidelia Medina, vecinos de La Colina de Tirrases, en Curridabat.
“Pienso que, como estrategia de carrera, debo ser muy conservador en los primeros 10 kilómetros para después cerrar con fuerza. En México perdí la clasificación en los últimos cinco kilómetros”, expresó ayer Segura en su apartamento en Aserrí, minutos antes de salir hacia el aeropuerto Juan Santamaría.
El marchista viajó a Madrid, España donde hizo escala antes de seguir a Milán, Italia.