Deportes
Miércoles 17 de agosto de 2011, San José, Costa Rica
Pasión por el deporte

Carlos Howden Pascall, presidente de Limón

¿Adónde voy a irme?”

Rodolfo Martín

rmartin@aldia.co.cr

No tiene razones para huir y resiente la durísima experiencia en la cárcel, en donde el primer mes durmió en el suelo, por lo que Carlos Howden Pascall, presidente de Limón F.C., adelantó ayer que sus abogados solicitarán nuevamente la excarcelación.

“¿Adónde voy a irme?”, se preguntó el dirigente, entrevistado en la Unidad de Admisión de San Sebastián donde está preso desde el 5 de junio.

Es sospechoso de lavar unos $30 millones (¢15.433 millones), según la fiscalía. El dinero provino de Rodney Morrison, un hermano suyo que descuenta 10 años de prisión en Nueva York por portación ilegal de armas.

Pascall contó que al inicio, se opuso a ser visitado por familiares y amigos porque sentía vergüenza de que lo vieran ahí, pero luego tuvo que ceder.

Llegó a la entrevista con un jean azul y una camiseta impecablemente planchados, arguyó seguir detenido porque las juezas que atendieron las dos últimas audiencias creen que puede huir.

“Vendí todo lo que tenía en Estados Unidos para venirme a vivir a mi país. Aquí conocí a la que sería mi esposa y con quien tengo dos hijos. Mis únicos negocios están en Limón. Tengo 52 años, ¿adónde voy a irme para comenzar de nuevo ? ¿Quién me dará trabajo a esta edad?”, se preguntó Pascall quien luce más delgado.

Carlos reconoce haber recibido dinero de su pariente, pero aclara dos cosas: una, que si acaso fue la mitad de esa suma, incluidos los intereses ganados por las inversiones hechas aquí y dos, que los fondos fueron movilizados a través de un banco estadounidense a otro banco tico.

La nueva audiencia sería el 3 de setiembre, fecha en que se cumplen tres meses de los seis de prisión preventiva impuestos.

Con las uñas

Pascall agradece que las autoridades mantengan sus negocios abiertos porque “el 75 por ciento de los empleados aún conservan sus empleos”, pero hay dificultades porque las cuentas bancarias están congeladas y no hay flujo de caja.

“Estamos trabajando con las uñas”, expresó Carlos, quien dijo que sus negocios por ahora son administrados por una asistente y un primo.

Su esposa también colabora, algo que antes no hacía debido a la falta de tiempo porque es funcionaria de una empresa transnacional y por atender las obligaciones de su casa en Limón.

“Si yo estuviera afuera quizá sería un poco más fácil”, agregó.

A Pascall también le inquieta el tema administrativo y deportiva del equipo Limón F.C., pero se muestra optimista por los reportes que le ofrece semanalmente su gerente Lindell Rouse.

“Le estamos pagando a todos (jugadores y administrativos), pero por partes, lo cual significa que no estamos totalmente al día como antes”, dijo.

El presidente reaccionó preocupado por la última derrota de Limón F.C. cuyos juegos sigue por la televisión.

“No es por menospreciar a Santos, pero creo que los jugadores aún pensaban en su victoria contra Saprissa y no le pusieron suficientes ganas”, añadió.

No hay como el talento limonense, pero, aclaró, debemos trabajar más en su aspecto mental.

Asimismo, le intriga haber observado una merma en la asistencia al estadio Juan Gobán durante las últimas fechas, una circunstancia que espera que cambie.