La surfista nacional Lisbeth Vinda fue la ficha estrella de Costa Rica en el Mundial, ya que solo ella le entregó 475 puntos a la Nacional, además de que demostró que su carrera no está acabada.

“El Mundial estuvo muy bueno. Fue un evento difícil para Costa Rica. Quedo contenta con ser la carta importante del equipo”, comentó la local de playa Jacó.

Para Vindas la meta de la selección en el Mundial no se cumplió, ya que la Tricolor estaba para mucho más, en una playa que conoce al dedillo. “Nos pudo ir mejor, había muy pocos países y eso hizo que la competencia fuera más reñida, pero es una playa que nosotros conocemos, no sé que pasó, fue muy raro”, añadió.

La nacional espera ahora profesionalizar más su entrenamiento personal, para revalidar su título en Costa Rica.