San Salvador de Jujuy, Argentina.- Acompañado de Fernando Colombo, su inseparable amigo, y quien trabajó con él en Alajuelense, Marcelo Hugo “Popeye” Herrera, extécnico manudo, llegó a saludar a los seleccionados.
Habitante de Jujuy, el “Popeye”, solo tuvo que trasladarse unos siete kilómetros desde su casa hasta el hotel Altos de la Viña, donde se aloja la Tricolor, para darle un fuerte abrazo a Rolando Villalobos, Luis Miguel Valle, Jorge Gätgens y César Elizondo entre otros costarricenses.
“Hubiera sido lindo poder charlar con don Ricardo (La Volpe). Lo conozco de vista y tuve un contacto con Flavio Davino, con quien he conversado de aspectos laborales, pero hay otra gente amiga. Vino Rolando Villalobos, César Elizondo, “Luisito” Valle, Jorge Gätgens, la mayoría de los jugadores los conozco y ustedes la prensa que no los voy a olvidar”, dijo Marcelo, quien en Jujuy posee una escuela de fútbol.
Costa Rica viene a un torneo importante con jóvenes. ¿Está la Selección para jugar tres partidos y partir a casa?
No lo veo de esta manera. Creo que todo es experiencia, que es un proceso necesario y se vino esta obligación, no porque sean menos los jugadores que vinieron, pero lógicamente hay otros, quienes tienen otra trayectoria y otro presente futbolístico.
¿La presión de jugar Copa América puede afectar a los futbolistas ticos?
No creo, porque ellos han jugado en una “Cueva” y en un Morera lleno. Son jugadores que saben de qué se trata actuar en campo lleno. El partido mañana (hoy) va a ser muy importante porque Jujuy está revolucionado y creo que Costa Rica tendrá el apoyo de la gente, porque siempre se da esto que son chicos y se les toma cierto cariño, pero no debemos olvidar que son jugadores importantes.
¿Cómo ve a Costa Rica, pasando a segunda ronda, o eliminada, pero jugando bonito?
En el fútbol nunca se sabe. Es una Selección nueva y hay que tenerle paciencia a los muchachos y que ellos puedan plasmar en el campo lo que el técnico les pide.
En Costa Rica usted se fue y la Liga es bicampeón. ¿Por qué usted no pudo y otro técnico sí logró el cetro?
¡Que alegría! Esto hay que verlo como un proceso que se había estipulado el día que yo llegué. Nosotros habíamos programado y vaticinado con mucho tiempo de antelación. Fue un trabajo organizado de cero y se subieron los escalones. La Liga subió en virtud de lo que todos esperábamos. La Liga hizo lo que se propuso del proyecto y lo armó bien.
¿Usted armó esa base para el bicampeonato manudo?
Bueno, es lo mismo que hablábamos de la Selección, para que los chicos sean jugadores de Selección tienen que jugar; para que los chicos tengan una participación directa en las definiciones deben jugar. Yo los hice actuar, pero los técnicos que vinieron después, tienen su granito de arena. No me doy todo el crédito.
