Estudiantes y funcionarios de la Universidad de Costa Rica (UCR) ayer debieron dejar guardados sus carros en las cocheras o estacionarlos fuera del campus a raíz del Día sin Humo.
La institución procura, desde el 2007, reducir las emisiones de gases de los vehículos, por lo que los portones de ingreso permanecen cerrados cada 5 de junio, Día Mundial del Ambiente. La celebración ayer se adelantó.
“Es un compromiso de no sacar el auto de la casa y buscar otra forma de transportarse. Necesitamos un cambio en el país para mejorar las condiciones ambientales”, señaló la directora del Programa de Gestión Ambiental Integral, Yamileth Astorga.
De 6 a.m. a 5 p.m., solo ingresaron vehículos híbridos, que usan formas alternativas de energía.
Astorga explicó que el horario se debe a una consideración para las personas que vienen directamente de sus trabajos.
Durante el día, decenas de personas aprovecharon las calles vacías para correr, patinar y hacer torneos deportivos.
Además, la Compañía Nacional de Fuerza y Luz regaló 1.000 fluorescentes para propiciar el ahorro de energía en los hogares.
Control de Tránsito
La Policía de Tránsito realizó pruebas de emisión de gases a los vehículos que transitaron frente a la entrada principal de la UCR, con el fin de disminuir el tráfico en las cercanías de la institución.
A tres autobuses estudiantiles y a un taxi los multaron y les retiraron las placas.
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