El lunes regresó de nuevo a trabajar en su academia Warehouse Dance Center, porque sabe que mantenerse ocupada es bueno para ella.
Maripili Araya tiene muy abierta la herida luego de la pérdida de sus gemelos. Ella tenía siete meses de embarazo.
“Desarrollaron un síndrome llamado transfusión feto a feto”, contó Araya. Uno le pasó sangre al otro y por eso le dio anemia. El hermanito recibió mucha sangre y su corazón no pudo bombearla y le dio un paro.
De forma muy valiente, ella debe de enfrentarse a la rutina diaria, pero no sin antes ayudar a otras mujeres. “Ellos pudieron salvarse de haber tenido en el país una máquina que por medio de láser hace operaciones en el vientre. No existe en Centroamérica”, manifestó.
Adelantó que su meta será que en Costa Rica se pueda adquirir una en algún momento.
Araya anotó que se encontró que no hay mucha literatura sobre el síndrome.
“En el país no hay grupos de apoyo, por medio de Facebook encontré un sitio de estadounidenses y canadienses que pasaron por lo mismo”, explicó.
“Ha sido el momento más difícil que hemos vivido como familia. El dolor no se quita con nada”, anotó la exjueza.
