Su ideología política es su fiel acompañante. Sus camisetas siempre hacen alusión a personajes caracterizados por su beligerancia social.
Aún así, su pensamiento socialista no lo alejó del Ser Supremo. Rónald Vargas Araya recibió un llamado espiritual y por eso durante 18 años fue sacerdote en Guanacaste.
Él declaró ser un defensor de las causas de las personas más necesitadas.
Por eso mismo, este hombre de 45 años decidió dejar el sacerdocio para entrar de lleno a otra de sus vocaciones: la política.
Pretende hacer una gran campaña para las próximas elecciones del 2014 y así obtener un escaño dentro de la Asamblea Legislativa.
De la iglesia a las papeletas
- ¿Qué lo indujo a tomar la decisión de retirarse de la Iglesia?
Para los católicos, lo moral es lo más importante. Dejan de lado lo social. Ese fue uno de los motivos que hicieron que me volcara a la política. La Iglesia me prohibía ayudar en situaciones muy duras.
- ¿Busca entonces tener más control sobre esas injusticias que menciona?
Sí, quiero transformar estas situaciones de injusticias que mantienen muy mal a esta provincia desde hace varios años.
- ¿Intentará pertenecer a un partido de izquierda?
A mí me hubiera encantado resucitar el partido Confraternidad Guanacasteca, que estuvo vigente en esa provincia en los años 30 y 40. Pero eso es difícil. Me inspiro en el filadelfino doctor Francisco Vargas y retomo sus ideales políticos. Esos pensamientos quiero ponerlos en práctica en el partido Frente Amplio, que es nuevo en la provincia.
- ¿No siente que hay un roce entre la temática que apoya el Frente Amplio y las creencias que tuvo como sacerdote?
A simple vista pareciera que la doctrina que tiene el Frente Amplio tiene muchos roces con el ideal de la Iglesia Católica. La Iglesia es tradicionalista y el Frente Amplio es muy libre en ese sentido, pero sus líderes me han dicho que en el Frente caben todo tipo de pensamientos que respondan al socialismo.
- Si ganara una curul, ¿sería un diputado de mayorías o uno de minorías?
Yo abogaría por las minorías. Entre esas estarían, por ejemplo, los pescadores, los migrantes, los privados de libertad, discapacitados, las amas de casa, las empleadas domésticas y por supuesto, abogaría por el campesinado, que desgraciadamente muere en Guanacaste.
¿Votaría a favor o en contra de proyectos de ley como las uniones de personas del mismo sexo y el aborto?
Son temas muy candentes; muy delicados. En el caso de las uniones homosexuales, yo quitaría la figura jurídica del matrimonio que no va para las uniones de dos personas del mismo sexo. Hablaría de unión de personas del mismo sexo. Eso les daría todos los derechos que da el matrimonio. El aborto no lo acepto por mis principios cristianos. Vida humana hay desde el momento en que se encuentra el espermatozoide con el óvulo, ya que se crea una criatura independiente que no le pertenece ni al padre ni a la madre. Sin embargo, hay circunstancias en las que habría que analizar si es posible el aborto. Por ejemplo: abuso de niños o de personas con discapacidad, entre otros.
- ¿Cuál será la forma suya de hacer campaña política mediante redes sociales?
Va a ser muy digital y bueno, recurriré a lo que en su momento hizo Ottón Solís, como el diálogo ciudadano; conversar en los parques. Somos un partido sin dinero. La cuenta que tenemos aquí en Guanacaste está en cero.
- ¿Cree usted que los devotos que iban a sus misas van a votar por usted?
Se puede dar de todo. Algunos pueden verse traicionados por mi opción política. Pero sigo siendo el mismo. Lo único que no hago es que ya no celebro misa. Yo esperaría que me den su apoyo con el voto. De hecho, voy a comenzar mi campaña con gente de Iglesia. Van a parecer pequeñas celebraciones religiosas.
- ¿Ha pensado en qué haría si no consigue quedar como diputado?
Yo no me quise meter en esto hasta no tener un plan B. Claro, lo he estado preparando. Si no quedo de diputado, me dedicaré a dar lecciones en las universidades en Guanacaste y en algún proyecto con pescadores.
- ¿Volvería a ser sacerdote?
Hay una posibilidad de regresar. El obispo me dijo que si no me casaba, tenía la opción de volver. Veo difícil que regrese, pero sólo los ríos no se devuelven.
Hora de dar la noticia
- ¿Qué le dijo su familia cuando anunció su retiro del sacerdocio?
Esto ha sido duro; ha causado hasta división en la familia. Mi hermano es alcalde de Palmares (Bernal Vargas Araya); mi familia ha sido politiquera. Sin duda, los hombres me han apoyado más; las mujeres no tanto. A mi mamá no le he contado, pues hace unos meses le dio un derrame cerebral y quiero evitar decírselo por ahora.
- ¿Sus compañeros sacerdotes amigos qué le dijeron?
Ellos me dijeron que yo era un sacerdote diferente; que siguiera en la Iglesia. Sin embargo, pudo más el amor a servir al pueblo de otra forma que la fidelidad al sacerdocio. Ya 18 años de sacerdote son muchos. Salgo con una mano adelante y otra atrás. Económicamente estoy mal. Uno sale y no le dan ninguna prestación ni nada de eso. Considero que la Iglesia debería ser más justa con quienes, como en mi caso, nos retiramos del sacerdocio.
El nuevo político
Ronald Vargas Araya
Edad: 45 años
Hermanos: Tiene cinco
Ideología: Socialista
Nació: Palmares, Alajuela
Un deporte: Baloncesto
“Hobby”: Leer y escuchar música trova o clásica. Estudia Derecho, por lo que dedica bastante tiempo a sacar adelante su carrera.
Ídolos políticos: “ Ché” Guevara, Jorge Volio y monseñor Romero.
Ídolos religiosos: El sacerdote Rodríguez, que murió en la dictadura de los Tinoco, el padre Francisco Vargas y el general Jorge Volio.
A quién admira: A todos los grandes luchadores por la paz, como Gandhi y monseñor Óscar Arnulfo Romero.