Esther Rodríguez siempre ha admirado a su mamá y el trabajo que realiza, es por eso que decidió seguir sus pasos.
La joven de 25 años, quien acaba de ganar el concurso Piel Dorada junto con Alba Rodríguez, trabaja con su madre en el salón de belleza de esta.
“Siempre me gustó lo que hacía mi mamá, así que decidí estudiar estética”, contó.
Aparte de recibir un dinero extra, todos los conocimientos los aplica en sí misma. “En el pasado certamen yo me peiné y me maquillé sola”, confesó.
Le va muy bien
Esther trabaja como modelo desde hace ocho años, labor que paga la mayoría de sus gastos, pero en un momento estuvo a punto de dedicarse a otra cosa y ser matinadora profesional.
“Desde que estaba en la escuela me metí a competir y en el colegio logré ser campeona nacional”, recordó.
Los raspones que se pegaba no se llevaban con los desfiles y una caída que le produjo serias lesiones en una pierna ayudaron a que Rodríguez colgara los patines definitivamente.
Ella está a la espera de que este 19 de mayo la organización le entregue los premios que le deben: $2.000 en efectivo, una motocicleta, un tratamiento dental completo, una cirugía estética a escoger y un teléfono celular.
“Todavía no sé en qué utilizar la cirugía, puede que en mejorar mi figura, disminuyendo mi cintura...no lo sé, porque tiempo atrás si quería, ahora lo tengo que pensar mucho”.
