Sabía que tras su expulsión ante Saprissa lo iban a castigar, pero lo que el joven Sergio Hernández, jugador de Orión, no esperaba, es que le recetaran tres partidos de suspensión.
“Es un castigo muy riguroso, todo el mundo observó que no hice nada y por eso estoy muy dolido con la sanción. Estoy empezando y que ahora me castiguen así, sin duda me perjudica, me costará acoplarme al equipo”, dijo Hernández, quien recordó que se ganó la amarilla, pero no la roja.
“Cuando Gabriel Badilla iba a cobrar un tiro libre, me paré frente a la bola, luego me hice a un lado y le di un golpe sin culpa al árbitro y vino la tarjeta. Al caminar hacia atrás, el juez le manifestó a mis compañeros que lo escupí y me sacó la roja, pero no hice eso”.
Juan Luis a la defensa
Juan Luis Hernández, técnico y presidente de Orión, salió en defensa del joven, manifestó que ayer presentó la apelación.
“La presenté ante el Comité Disciplinario de la Unafut, solicité una investigación del caso y pedí información de la forma en que nombran a los árbitros, porque si una persona tiene ese nivel cultural que mostró, no está apta para dirigir un juego”.
Se enojó
Sergio Hernández destacó que se enojó al enterarse de que en el informe el juez aseguró que recibió un escupitajo.
“Me dio cólera que dijera eso. Me cobró el derecho de piso, porque a alguien con experiencia no le hace eso. Sabía que esa roja me iba a traer un castigo, pero cuando mucho imaginé dos compromisos, nunca que fueran tres”.
El joven de 18 años recién cumplidos, entrenó ayer con la U- 18, mañana se integra a Orión y desconocía que Juan Luis ya había presentado la apelación.
Sergio, quien vive en Calle Fallas de Desamparados, debutó en Primera con Brujas y, frente a Saprissa, fue el segundo encuentro que disputó con Orión en la presente campaña.
