El albergue del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) en Patarrá, Desamparados, quedó destrozado el miércoles luego de que dos niños perdieran el control y decidieran escapar.
Los menores, de 7 y 11 años, quebraron vidrios, rompieron platos y empujaron mobiliario.
Las tías (mujeres a cargo de su cuidado) metieron a los otros 10 niños a un cuarto para resguardar su seguridad. Debido a que no existen guardas en el lugar, los dos pequeños aprovecharon ese momento para huir.
Intentan volver a la normalidad
A los menores los localizaron en La Carpio y Alajuelita. Fueron trasladados a las oficinas regionales del PANI para decidir si los reubicarán en otros albergues.
Las autoridades del PANI solicitaron ayer al Hospital Psiquiátrico el diagnóstico y tratamiento inmediato para el niño de 11 años.
Ayer se repararon todos los daños en el inmueble. Además, a los niños que presenciaron el incidente se les brindó atención psicosocial para que pudieran volver a la calma.
Ayer no fue posible ingresar al albergue ni contactar a las tías que ahí laboran, pues el PANI prefirió evitar más situaciones que puedan generar preocupación y temor en los menores.
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