Ayer se realizó el funeral del ingeniero Marcelo Fernández Villalobos, de 22 años, quien murió en un accidente de tránsito provocado por un hombre que conducía en estado de ebriedad.
El suceso se registró la madrugada del jueves, cuando un sujeto de apellido Molina conducía con 2,11 gramos de alcohol por litro de sangre e impactó por detrás el carro que conducía el joven.
Las honras fúnebres de Fernández se efectuaron en la capilla de los Salesianos, en Zapote, la cual, se llenó de decenas de amigos, familiares y conocidos para darle el último adiós.
Héctor Fernández, padre de la víctima, comentó durante la misa que su hijo era un gran soñador y que la mayoría de sus propósitos los lograba cumplir gracias al gran esfuerzo que hacía.
Además, incentivó a los padres presentes a demostrarles a sus hijos cuánto los quieren por medio de abrazos, palabras y besos.
“Yo lo hacía con Marcelo. Le daba media vergüencilla pero nunca se quitó”, dijo Fernández.
Investigación por homicidio
El Juzgado Penal de Goicoechea le impuso a Molina cuatro meses de prisión preventiva.
El hombre fue detenido el viernes en su casa ubicada en Tres Ríos y fue indagado en una audiencia oral y privada en los Tribunales de Goicoechea.
“No tomemos el riesgo de tomar un volante cuando hemos bebido. Para no provocarle a una familia el mismo dolor que nosotros estamos viviendo”, agregó el padre de la víctima.
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