Deportes
Domingo 25 de septiembre de 2011, Costa Rica
Pasión por el deporte

En mayo próximo la bandera de Costa Rica estaría en lo más alto del planeta Tierra

Warner Rojas sueña con la cima del Everest

Sofía Quesada Chavarría

squesada@aldia.co.cr

La primera cima a la que llegó fue a la Cruz de Alajuelita. Duró cuatro horas para recorrer los tres kilómetros que separaban su casa de aquella montaña.

Fue en una Semana Santa y recuerda que por insistencia de su madre Cristobalina accedió a hacer la romería hacia la cruz junto a ella y sus dos hermanas.

Cuando Warner Rojas, con 11 años, llegó a la cúspide y tocó la cruz quedó impactado. “Vi todo el Valle Central, el volcán Irazú y observé montañas que nunca había visto. De ahí nació el deseo de escalar montañas”.

Su corta edad no le permitió iniciar con esa aventura inmediatamente y fue hasta cuatro años después, con 15, que empezó a hacer caminatas por diferentes montañas del país.

Primero fueron los cerros de Escazú, luego el cerro de la Muerte y el Chirripó, que ha subido en 70 ocasiones. “En esas caminatas me encontraba gente que hablaba de otras montañas fuera del país y siempre me animaban a conocerlas”.

Con 26 años se puso el objetivo de ascender las cumbres de Centroamérica y después de conquistarlas decidió hacer una pausa de dos años.

Tras su regreso en el 2001 escaló diferentes montañas de México, Estados Unidos y Sudamérica hasta que en el 2007 se trazó un nuevo objetivo: subir los Siete Picos Andinos, meta que logró el 30 de agosto.

Rojas se convirtió así en el segundo centroamericano en lograrlo después del guatemalteco Juan Viñals, quien lo hizo el año pasado y que también ha alcanzado la cima más alta del mundo, el Monte Everest.

Nada es inalcanzable

En cada ascenso Warner Rojas no solo carga con los 28 kilos de implementos de montañismo sino con la ilusión de alcanzar la cima del mundo.

La montaña más alta que conoce es Aconcagua en Argentina, a 6.962 metros de altura. Según Rojas en ella se sintió bien físicamente, su cuerpo le respondió y no se desestabilizó, pero no sabe como reaccionará a 8.848 metros.

El Everest espera escalarlo en mayo próximo pero para Rojas no es la cumbre más importante que desea alcanzar. “Me gustaría porque es la más alta del mundo pero también quiero hacer otras montañas de 8.000 metros que son más complicadas y técnicas que el Everest, como Cho Oyu y Makalu (en el Himalaya)”, contó.

Warner asegura que para escalar cualquier montaña se requiere un 70 por ciento de fortaleza mental y un 30 de fortaleza física. “Para ser montañista hay que ser soñador, luchador y constante, es un estilo de vida. Para lograr los objetivos tenés que aprender a soñar, ser constante para lograr esos sueños y luchar para que no te los quiten, nada es inalcanzable”.

Implementos

Botas Primero se pone unos zapatos de lana que sirven para el frío, después las botas, que pesan dos kilos cada una.

Guantes Dos tipos: los de lana para calentar las manos y encima van otros especiales para el hielo y las rocas.

Casco Con agujeros de ventilación pequeños para asegurar la protección contra las rocas.

Anteojos y bufanda Deben ser polarizados , con filtro UV y que cubra los lados de los ojos.

Krampones Suela metálica que se adhiere a la botas para obtener un buen agarre en hielo.

Mosquetones Anillo de metal que junto a la cuerda son esenciales y seguros para escalar.

Piolet Es una especie de pico-martillo que sirve para escalar en hielo o para subir valiéndose de él.

Chaqueta Hecha de fibra de ganso y bolsa de dormir de pluma sintética para temperatura de -20C.