Deportes
Domingo 25 de septiembre de 2011, Costa Rica
Pasión por el deporte

Jugador de los Yankees ya suma 603 salvados, todo un récord

Mariano Rivera, el hombre del apague y vámonos

Nueva York, Estados Unidos/AP.- Mariano Rivera se quedó con su soledad en el centro del díamante en Yankee Stadium.

Por una vez, el cerrojero implacable no estaba seguro de qué tenía que hacer. Así que sonrío, le tiró un beso al público y luego se quitó la gorra mientras una ovación lo envolvía tras lograr el rescate 602 de su carrera el pasado 19 de setiembre.

“Oh, Dios mío, por primera vez en mi carrera me quedé solo en la lomita”, No tiene precio, no sabía que podía ser tan bueno”, dijo el panameño a quien llaman los narradores “apague y vámonos”.

Desde hace tiempo considerado el mejor relevista de la historia, Mariano Rivera ostenta la mayor cantidad de salvamentos en Grandes Ligas.

Estableció el récord con un noveno inning perfecto para preservar la victoria 6-4 sobre los Mellizos de Minnesota.

Con los aficionados de pie y vitoreando desde su primer lanzamiento de la entrada, el derecho de 41 años retiró en orden a Trevor Plouffe, Michael Cuddyer y Chris Parmelee.

Parmelee se ponchó con un strike cantado mientras el Yankee Stadium rugía. ¿Cuál fue el lanzamiento? Tuvo que ser una recta cortada, la tarjeta de presentación del canalero.

Un logro fenomenal al considerar que ese es básicamente su único lanzamiento. Los bateadores rivales se han cansado de ver pasar esa recta, pero nadie es capaz de descifrarla. En tanto, Rivera cuenta con una carrera que le tiene asegurado un sitial en el Salón de la Fama y ha sido uno de los pilares de cinco equipos que se consagraron campeones de la Serie Mundial.

El único que se resiste a decir que no es el mejor cerrador de la historia es el mismo Rivera.

“Jamás podría decir semejante cosa, ya me conocen”, dijo Rivera. “Lo único que puedo decir es darle gracias a Dios por mis compañeros. Ellos me dieron la oportunidad. Nunca me pondría a hablar de mí mismo. Eso es imposible”, añadió.

El récord es algo muy difícil de imaginar, al menos en 1995, cuando Rivera debutó. Comenzó como abridor, uno que apenas duró tres entradas y un tercio y perdió 10-0 contra los Angelinos en su debut, antes de convertirse en una estrella desde el bullpen.

Rivera logró sus 602 rescates en 674 oportunidades. Hoffman consiguió 601 en 677 intentos.