Un sector de habitantes de Caño Negro de Los Chiles, mayoritariamente finqueros, anunciaron el fin de semana su oposición a un plan de manejo del Refugio Nacional de Vida Silvestre Mixto Caño Negro para los próximos 10 años.
Los adversarios objetan la ampliación de la zona de amortiguamiento en hasta 1.500 metros. Argumentan que no les permitiría llevar a cabo actividades de agricultura, ganadería y turismo.
La lucha contra algunos componentes del plan la encabeza el Comité de Desarrollo Sostenible local, que el sábado logró que la municipalidad también se pronunciara contra el mismo.
En la elaboración del proyecto cuestionado participan, desde el 2010, la Agencia Española para la Cooperación Internacional, el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inbio), el Minaet, el Proyecto Río Frío, vecinos de Caño Negro y La Unión de Los Chiles, San Rafael y Santa Fe de Guatuso.
Para justificar el proyecto, los encargados aseguran que el refugio está amenazado por pesca ilegal e indiscriminada, cambios en el hábitat por sedimentación y contaminación de agroquímicos.
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