Para Xinia Morales ayer, Día de la Mujer, fue una jornada como cualquier otra. Es más, se enteró de la celebración porque su hijo, José Luis Mora, de 9 años, se lo mencionó en la mañana.
Ella se despertó temprano para ordeñar vacas y hacer queso. Dejó al “chiquitín” en la escuela, trabajó como empleada doméstica –para ganar dinero extra – y regresó para laborar en la finca El Ángel, en Matinilla de Coronado.
Al igual que Morales, 32.277 mujeres se dedican a actividades agropecuarias y otras 138.241 al servicio doméstico, según la Encuesta Nacional de Hogares.
El Informe Estado de la Nación señala que persisten los problemas de trabajo femenino debido al desempleo, inserción precaria, jornadas parciales y brechas en ingresos.
“De acuerdo con los datos del 2011, hubo una mayor inserción de mujeres en el sector laboral. Pero remunerativamente no es significativo por las áreas en las que se insertan: comercio, servicios y trabajo informal”, dijo la directora del Instituto Nacional de la Mujer, Maureen Clarke.
La jerarca destacó que una de las grandes limitaciones es el cuido de la familia, por lo que buscan trabajos con jornadas inferiores y tienen menos opción de estudiar.
Xinia Morales lucha por forjar un mejor futuro para su hijo. “Que no se le olvide que lo poquito que hemos logrado (ella y su esposo), lo hicimos por él”, dijo.
* Colaboró Albert Marín.
