Domingo 24 de julio de 2011, San José, Costa Rica

Cantante

Julio Nájera

Rodolfo Rodríguez

rodolfo.rodríguez@aldia.co.cr

Su rebeldía y sobre todo el no dejarse absorber por el estado de confort hace que juntos, Akasha y su vocalista Julio Nájera, sigan a la caza de sus sueños.

Creció en los escenarios, acompañando a su papá (Julio Nájera), integrante de Vía Libre. Desde los ocho años empezó a estudiar música y desde los 16 forma parte de bandas.

Precisamente, al mencionar que pasan por su mejor momento, la agrupación piensa seriamente en alistar maletas.

“Queremos ir a México a tocar puertas, a lo valiente, hay contactos pero sin respaldo, no tenemos de qué quejarnos, pero creo que es hora de expandir rumbos y si nos quedamos no creo que suceda, nos gustaría dejar un legado de nuestra gente”, citó Nájera, quien puso como fecha de salida el 2012.

El crecimiento de la agrupación ha sido constante desde el 2006 con su disco “Descriptar”, luego la fusión exitosa junto a Marta Fonseca con el tema “Profanar” y su última producción, “Cerca del Sol” (2010).

Evolución musical

Fundada desde el 2004 por Emanuel Sotela y Roberto Artavia, ambos guitarristas, el último de estos dos se retira de la banda por un tema personal.

“Estamos tristes por supuesto, pero felices ya que creemos que el nuevo integrante va a aportar muchas cosas a la banda”.

“No nos gusta estancarnos y apegarnos a una misma fórmula, no dudo que cambie el sonido”, aportó Nájera.

No hay mucho tiempo libre, pero el poco que tiene lo aprovecha para ir a pasear a la playa. En su momento practicó el surf y en lo personal le teme al fracaso.

Aparte de la música, le gusta compartir en familia y en especial con su hija de 10 años. Como papá se describe como divertido y muy paciente.

En su casa tiene dos perros como mascotas: “Pancake” y una perrita tuerta, sin dientes que adoptó, “Bianca”. Julio también es profesor de inglés.

Tiene cerca de 27 tatuajes, siempre le gustó, el primero se lo hizo a los 14 años y cuando lo descubrieron tuvo que rendir cuentas con su papá, a quien no le agradaba la moda.

Compone desde pequeño a tal punto que no recuerda su primera canción. “Alunizar”, uno de los últimos temas de Akasha, la compuso en 10 minutos.

No se imagina fuera del ámbito musical, su proyecto de vida es crear una escuela especializada en la música. Su mejor experiencia ha sido una gira a Boston.