Más de 25 enfermedades están asociadas al consumo de tabaco, sobre todo cáncer y males cardiovasculares.
Eduardo Sandí, experto en adicciones del IAFA, aseveró que los fumadores tienen cuatro veces más posibilidad de sufrir infarto, pues el tabaco obstruye las arterias.
También causa hipertensión, enfermedad vascular periférica, derrame cerebral y disfunción eréctil.
En cuanto a cáncer, se estima que uno de cada tres tumores está asociado al tabaco, sobre todo aquellos en labio, lengua, faringe, laringe, esófago y pulmón.
Además, según Sandí, fumar produce padecimientos respiratorios como bronquitis, enfisema pulmonar, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y otras.
El humo de tabaco es una mezcla compleja que contiene más de cuatro mil sustancias químicas, de las cuales 40 son cancerígenas.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) invierte al año alrededor de ¢73 mil millones en atención a pacientes con enfermedades relacionadas al tabaco.
Datos del IAFA indican que 10 personas mueren a diario en nuestro país víctimas de padecimientos derivados de fumar.
“Cuanto antes se deje de fumar mejor, porque hay un momento en que los daños son irreversibles. La persona cuando deja de fumar a la semana experimenta cambios en la presión arterial y la capacidad respiratoria”.
El tabaquismo es una dependencia física, pues el organismo se acostumbra a funcionar con ciertos niveles de nicotina y cuando no los obtiene, el cuerpo sufre. Es ahí cuando se produce ansiedad, desesperación, intranquilidad, depresión, dolor de cabeza y estreñimiento.
