Nadie dijo que dejar de fumar era fácil y eso lo sabe en carne propia Diego Abadía, quien tiene cinco meses de haber puesto fin a su adicción de más de 20 años.
“Ha sido muy difícil porque es un vicio que te consume; es parte de uno mismo. Ahora pienso en los demás y en la gente que amo”, dijo Abadía, quien fumaba un paquete al día.
Abadía, de 38 años, trabaja en el área de bienes y servicios del Hospital de Alajuela y fue allí donde el médico Efrén García le invitó a participar en la clínica de cesación para alejarse por completo del tabaquismo.
Las terapias, el apoyo profesional, los testimonios de personas que lograron vencer al cigarrillo y el apoyo de su familia fueron sus armas para alcanzar el objetivo.
“Llevo bastante tiempo de no fumar y ahora la Ley me ha ayudado más a sostenerme y dar por un hecho que soy un ex fumador”, aseveró.
Desde el 1.° de noviembre de 2011 decidió acabar con el fumado. Ha sentido cambios en su cuerpo; ya no se cansa como antes y respira mejor.
“Espero más resultados. Todo es positivo cuando uno decide dejar de fumar”, dijo.