La patada voladora que le lanzó un aficionado holandés al guardameta Esteban Alvarado se canjeó por una dura e histórica sanción en su contra.
La justicia holandesa decretó un castigo de 30 años sin poder ingresar a un estadio de ese país, al joven que entró al campo a golpear a Alvarado, el miércoles pasado, en un duelo entre el Ajax y AZ Alkmaar.
El meta nacional respondió con un par de patadas hasta ser contenido por compañeros de su equipo. Aunque fue expulsado, luego la federación holandesa le retiró la cartulina roja.
Tras la expulsión de Alvarado, el DT de su equipo el AZ Alkmaar, Gertjan Verbeek, consideró que la seguridad de sus jugadores no estaba garantizada y les pidió que se metieran en los vestuarios. Así, el partido se suspendió en el minuto 37 cuando el Ajax ganaba 1-0.
Tras las rejas
Una comisión de jueces de aquel país dispuso que el aficionado pasará 14 días en la cárcel. Sobre él pesan cargos de asalto agravado y violación de ingreso al estadio. El hincha, de 19 años, ya tenía prohibido el ingreso, pero se las ingenió para obtener una entrada para presenciar el encuentro a través de un socio. A la vez entró por un sector donde los controles no eran tan estrictos.
Las secuelas del bochornoso acto siguen en el tapete, ayer, una vez se conoció la pena, diferentes medios del planeta circularon la nota como Marca y As de España, además de Olé de Argentina.
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