Reconocido por ser uno de los rostros más atractivos de la serie “CSI: Las Vegas”, Gary Dourdan, dio un tropezón cuando estaba en lo más alto de su carrera, la cual le salió más caro de la cuenta.
El moreno de ojos claros nació en 1966 en Filadelfia, Pensilvania, Estados Unidos, según biografias.es.
Inició su carrera como modelo de la Boss Models de Nueva York y fue descubierto por la actriz y cantante Debbie Allen.
Debutó en el cine en 1993 en “Este Muerto Está Muy Vivo 2” y también tuvo pequeños roles en “The Paper”, “Alien: Resurrección” y “El Infiltrado”.
Su mayor éxito llegó con Warrick Brown, papel que interpretó en la serie “CSI:Las Vegas” entre el 2000 y 2008 cuando su personaje murió al final de la temporada.
Fue justamente su salida abrupta de la serie la que reveló sus problemas de la vida real.
Según el portal Wikipedia, el 30 de abril del 2008, Gary fue encontrado por la policía mientras dormía en un carro mal estacionado en una urbanización de Palm Springs.
El actor aparentaba estar bajo los efectos del alcohol y las drogas. Al ser detenido se le encontró cocaína, heroína, éxtasis y medicamentos para los que no tenía receta.
Tras pagar una fianza de $5 mil, (¢2,5 millones) salió a las pocas horas de la cárcel.
En un correo electrónico enviado a la prensa el actor alegaba que la droga que le encontraron no le pertenecían.
Un mes después se anunció su salida de la serie, sin embargo la cadena CBS dijo en un comunicado que no se referiría al arresto del actor.
El año pasado enfrentó dos nuevas detenciones.
La primera en junio por chocar dos autos estacionados y en donde además fue acusado por posesión de drogas y en noviembre luego de tener un altercado con su exnovia Nicole Vail Cannizzaro, quien lo acusó de agresión física y le impuso una orden de restricción, según el sitio nbc.com.
Desde entonces no ha vuelto a tener apariciones ni ha sido contratado para papeles en televisión.
