¿ Se puede imaginar a alguien que solo comen pizzas? Pues, Claire Simmons, aunque cueste creerlo ya suma 31 años de solo comer este platillo de origen italiano.
A lo mejor no sea el alimento idóneo, pero es lo suficientemente bueno para ella que prácticamente es lo único que ha probado desde su infancia, porque empezó a ingerir los trozos de pizza a los dos años.
Claire de Notting Hill en Londres, quien tiene 33 años, aseguró que durante estos años ha comido nada más que pizza de tomate y queso, según el portal depsicologia.com.
Los médicos que la han examinado le dicen que su dieta podría matarla ya que a su organismo le faltan nutrientes y vitaminas necesarias para una adecuada calidad de vida.
“Bebo abundante agua y hago ejercicio aunque sé que mi dieta a lo largo del tiempo es peligrosa para la salud”, destacó en el sitio depsicologia.com.
Ella dio a conocer su experiencia después de saber el caso de otra chica británica, Stacey Irvine que fue hospitalizada, y llevaba 15 años comiendo solo “nuggets” de pollo.
No es que ella no quiere comer otra cosa, es sólo que ella no puede. Tal parece que se estremece ante la sola mención de otros alimentos y se atraganta si pone otro alimento en la boca, divulgó el sitio www.latinosenlared.com.
Fuera de control
Lo que esta mujer sufre en realidad es conocido como trastorno selectivo al comer.
Se trata de una enfermedad que se expresa como rechazo o aversión a muchos alimentos, dejando solo un estrecho margen de alimentos que la persona quiere comer. Y al llevar una dieta restrictiva la persona no ingerirá los nutrientes necesarios que la pueden llevar a problemas de salud.
Este trastorno es común en niños con problemas de autismo o con trastornos de ansiedad. Se niegan a comer de casi todo y comen solo una o dos cosas, lo que origina gran trastorno en sus familias que no saben qué hacer.
Según Claire, ella se mantiene a sí misma saludable, pero eso no convence a su médico de cabecera quien dice que de seguir así, la falta de vitaminas y minerales, le va a producir problemas en el futuro. Tales como un derrame cerebral o ataque al corazón.
“No lo puedo evitar y me siento tan enojada cuando la gente piensa que estoy siendo caprichosa. Se trata de una condición médica real”, insistió Simmons que no ha sido hospitalizada por este padecimiento.
De acuerdo con Elsonline.com, los alimentos adictivos como el queso que contiene la pizza estimula los centros cerebrales y contienen sustancias químicas capaces de producir diferentes sensaciones de placer y bienestar.
Sea cual sea la causa, Claire no parece sentir molestia y por el contrario sigue pidiendo pizzas para llevar a casa.
