Deportes
Sábado 3 de marzo de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

Valdeir Vieira ha dirigido en 22 países con el mismo estilo

Badú, el gran amigo

José Pablo Alfaro.

jose.alfaro@aldia.co.cr

Se convierte en un confidente, en un amigo de los jugadores. Valdeir “Badú” Vieira, recordado en nuestro país por su peculiar forma de dirigir, considera que esta es la forma más efectiva de ganarse al camerino.

El “Trotamundos” brasileño, quien ha dirigido en 22 países, nunca ha cambiado su método, según contó desde Bahrein en entrevista telefónica con Al Día.

-¿Cuál es la clave para tener un buen camerino?

No sé si hay un método seguro, porque entre los jugadores hay diferentes culturas, cada jugador tiene su manera de ser, para mí algo muy importante es que el entrenador esté dispuesto a defender al futbolista. Tengo la seguridad de que si es así, el jugador es el primero que se va a dar cuenta de que el que tiene enfrente no es su jefe sino una persona que está ahí para ayudarlo; al futbolista hay que tratarle bien, porque se va a sentir mejor y trabajará con más ganas.

-¿Debe el técnico hacerse amigo de los jugadores?

Usted tiene un Guardiola que es amigo de sus jugadores y tiene éxito y tiene un Mourinho que no es amigo de sus futbolistas e igual tiene éxito. Lo que es seguro es que la persona feliz rinde más, entonces, si eso sirve en todas las áreas, también sirve en el fútbol.

-¿Cuán difícil es tener a los jugadores suplentes contentos?

Es importantísimo, porque si la banca no está satisfecha entonces ahí vuelve a haber peligro, si el entrenador trabaja con grupos y los intercambia, eso ayuda bastante en la formación de un grupo solidario. El jugador cree que hay que respetarlo como grupo, entonces si usted trata a todos los jugadores igual de bien se van a sentir compenetrados, el técnico tiene que estar para todos, a los suplentes hay que darles la seguridad de que también son importantes en el plantel.

-¿Cómo manejó la tensión en el grupo?

En un deporte como el fútbol es importante ganarse al público, tener a la gente de su lado, los equipos que juegan hacia adelante, que son ofensivos tienen siempre más amigos que los clubes defensivos, ahí ya te ganaste el público. La gente te ayuda a mantener motivado al equipo, entonces las probabilidades de que existan tensiones son menores, siempre y cuando los resultados te respalden, a veces uno tiene suerte y dura mucho tiempo, a veces no tanto. En la Liga todo salió bien -porque hubo resultados -. Nosotros con la Liga teníamos muchas actividades sociales, mis jugadores de aquella etapa entendieron su función social también, ahí cada uno sabía el papel que tenía que desempeñar.

-¿Pero la suerte no es la misma con todos los camerinos?

Mire, con excepción del Saprissa, yo nunca he tenido inquietudes, no hablo de problemas, pero fue por varios aspectos, yo estuve poco antes de la era Vergara, yo no sé si él me hubiera mantenido en el puesto. Yo estuve en una situación que los jugadores no cobraban su sueldo porque no había plata, y hasta en las mejores familias eso afecta y en el camerino se reflej. Pese a eso, en Saprissa he dejado muchos amigos.