Kansas City, EE. UU./AP.- El lanzador de los Yanquis, Mariano Rivera, dijo ayer que regresará al montículo en 2013, comprometiéndose a superar una lesión en la pierna que supone, pondrá fin a su participación esta campaña.
Al principio de los entrenamientos de primavera, Rivera había insinuado que se retiraría después de la temporada de 2012. Pero después de desgarrarse el ligamento cruzado anterior derecho el jueves, mientras capturaba elevados durante una práctica de bateo, no estaba muy seguro de lo que haría.
De vuelta en el estadio Kauffman, el taponero de 42 años, dijo firmemente que no permitirá que su carrera termine así.
“Regresaré. Escríbanlo con letras grandes. No me iré así. Esto me ha hecho pensar, no me puedo ir así. Si requiere dos, tres, cuatro, cinco, siete (temporadas) más, las que sean”.
Rivera se secó las lágrimas al hablar antenoche. Luego regresó a su habitación de hotel, reflexionó y tomó su decisión de no retirarse. Tiene un poco de esperanza de regresar al terreno al final de esta campaña.
“Ocurren milagros. Soy un hombre optimista. De lo único que me lamento es que decepcioné a mis compañeros. Fuera de eso estoy bien”, añadió.
Con Rivera fuera de acción, David Robertson probablemente asumirá como taponero, y es posible que el dominicano Rafael Soriano también tenga algunas oportunidades.
PICANDITO EN EL DIAMANTE
El médico será quien decida
Manuel Vargas, experto
Depende de lo que diga el médico. Ya son 42 años que tiene, y no se brincan así no más. A pesar de que su posición no es de tanto movimiento, sí es de preparación.
A lo que él dice que va volver y uno como yanquista, es lo que se espera. Robertson, que lo suplirá, ha demostrado que tiene capacidad, pero es un novato y es factible que le pese esto.
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