Muhammad Alí está bien, contento y siguiendo con su rutina diaria tras ser atendido el mes pasado por deshidratación, dijo ayer su vocero.
Craig Bankey señaló en un comunicado que el exboxeador fue atendido el 19 de noviembre, cinco días después del funeral de Joe Frazier.
Jeani Kahnke, vocera del Centro Muhammad Alí en Louisville, dijo que habló por teléfono el viernes con la esposa de Alí, Lonnie, y que le dijo que él estaba al lado de ella pidiéndole el desayuno y estaba bien de salud sin ningún problema.
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