¿Qué hizo Jafet Soto en el Herediano para ordenarlo, mantenerlo con buen ritmo, en los primeros lugares e invicto en el torneo local?
Hizo algunas variantes , pocas, pero con resultados.
Entre ellas, Anderson Andrade y Francisco Calvo. Además, le ha dado más minutos a Yosimar Arias, titular en algunas ocasiones, relevo en otras.
Reacomodó el sistema táctico a línea de cinco con la cual afianzó la defensa pero hizo al cuadro más ofensivo.
“No hemos terminado (el trabajo) porque lleva su tiempo, pero son conceptos básicos y sencillos que ayudan al jugador a tener herramientas para actuar en cualquier situación”, expresa Soto.
Estabilizó la formación titular. Jafet ha utilizado 20 jugadores estelares en diez partidos y Alejandro Giuntini, su antecesor, llevaba 25 en nueve encuentros.
Por supuesto, dejó de lado los pleitos con la prensa, con la afición y armonizó el camerino donde parece que las rencillas quedaron de lado, aunque los jugadores insistan en que nunca hubo.
“En lo anímico encontré a los muchachos no como uno quiere, pero encontré un buen grupo de jugadores, con mucha afinidad entre ellos”, dice.
Creyente del fútbol de control, de defender con muchos y atacar al menos con cinco hombres, no oculta que los resultados le están llegando antes de la cuenta.
“Sinceramente no los esperaba tan rápido. Manejamos conceptos distintos a lo que trabajaban, en defensa, de acuerdo a lo que creo del fútbol”, añade.
Y el jugador rojiamarillo lo ha entendido así. 21 goles a favor y seis en contra en diez partidos, cuatro de ellos internacionales, son la prueba.
“Nos cambió algunos movimientos en el terreno de juego, en todas las zonas, que nos ayudan a generar opciones”, expresa el central Erick Sánchez.
Víctor Nuñez habla de claridad en las ideas, de un técnico que se da a entender y sabe lo que quiere.
“Cada entrenador tiene su estilo. A algunos a veces cuesta entenderles o no se les tiene la confianza, pero Jafet es claro y brinda ese apoyo”.
Con lima
Jafet llegó además, a limar asperezas, aunque nadie en el plantel habla de roces con el técnico anterior, Giuntini.
Su carácter, la solidaridad con sus pesares laborales o deportivos, la amistad que brinda, se reflejan en la cancha.
“Jafet conoce la institución, fue jugador, fue director y la afición está metida con él, por eso trabaja tranquilo. Giuntini era un gran entrenador, pero siempre tuvo a la gente en contra porque quitaron a Orlando De León y lo trajeron a él y De León era muy querido. Siempre lo supo y eso lo perjudicó”, expresa Cristian Montero.
Julio Bustos, técnico nacional, dice que Giuntini creyó pelear por defender a los jugadores y no le resultó.
“Jafet ordenó eso, fue algo como mental, sin dejar de ser solidario les dijo a los jugadores juguemos y punto”.
Otro actor externo, Orlando De León, dijo que Soto visualizó las debilidades y trabajó en ellas.
“Conoce el camerino, es de la casa, vio lo positivo, quitó lo negativo e hizo funcionar al equipo”.
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