Deportes
Jueves 8 de septiembre de 2011, San José, Costa Rica
Pasión por el deporte

Ecuador siempre nos golea, con y sin altura

¡Basta de excusas!

Milton Montenegro

mimontenegro@aldia.co.cr

La humillación de la Selección ante Ecuador, fue como poner los pies en la tierra y que el triunfo del viernes ante Estados Unidos, se trató de un espejismo.

Lo sucedido en Quito tiene una explicación, según algunos expertos: la altura, más de 2.800 metros sobre el nivel del mar.

Sin embargo, Ecuador siempre nos golea, con y sin altura. Así fue en el Mundial de Alemania 2006, en el reciente Mundial Juvenil y en San José.

Los expertos tienen su explicación a lo que pasó en Quito.

“Para jugar en esa altura se debe estar unos 12 días antes, o llegar un día antes del partido para poder rendir, de lo contrario, al jugador le afectará la respiración, tendrá somnolencia y pereza”, dijo Manuel Gerardo Ureña.

Juan Carlos Arguedas manifestó que la altura hace tantos estragos, que da la sensación de que el futbolista no le pone ganas.

“La mente quiere mandar, pero el cuerpo no responde y falta el oxígeno. No se puede decir que los jugadores no metieron, ningún futbolista llega a pasear a la Selección, porque si se detecta a alguien así, el técnico lo saca”.

Alejandro Villegas, preparador físico de Saprissa, comentó que aparte de la altura, se debe tomar en cuenta que “hay que determinar si el equipo pudo recuperarse tras el juego en EE.UU. o viajó del estadio al hotel y de ahí al aeropuerto. Tampoco conozco si antes de partir a territorio norteamericano, se pudo hacer una labor regenerativa con quienes jugaron el domingo antepasado en el campeonato. Todo puede pesar”, dijo Villegas.

El “Puro” Ureña recuerda que en su época de jugador y al actuar en la altura, observó gente sangrando por la nariz, o pidiendo cambio a los 15 minutos de juego. “Las piernas se tornan pesadas, el cuerpo no le responde”.