San Isidro del General está tranquilo con el liderato que ostenta Pérez Zeledón.
En la calle no se observan signos externos. No existe efervescencia ni el jolgorio por ser los “mandamás” del torneo local, pero se dicen satisfechos e identificados.
La frialdad podría deberse al momento del torneo, con apenas seis fechas transcurridas (ni siquiera la mitad de camino) aunque algunos aficionados ven otros factores.
“El pueblo ha descuidado un poco al equipo porque les prestan más atención a otros clubes”, dice Randy Reilly.
En un recorrido por la ciudad, conversamos con saprissistas de corazón, con manudos de sentimiento, aunque todos dicen apoyar a los “guerreros”, que sería como un segundo equipo.
Claudio Amador, vendedor de lotería, espera que el cuadro llegue lejos, pese a ser morado de corazón.
“He visto muy bien al equipo, con muchas ganas y con un gran trabajo de motivación de Mauricio Wright”.
Práxedes Varela, pensionada, si mostró una identificación plena con los “sureños”.
“Este año están muy buenos, juegan muy bien y yo creo que sí pueden ser campeones esta vez y con mucho honor”, expresó.
Como primer equipo, como segundo o como sea, Santos medirá el domingo el sentimiento del pueblo, pero los jugadores piden estadio lleno.