Hanna Gabriels, nuestra campeona mundial de las 140 libras, corría con una tableta entre sus manos, para hacerle fotos a su novio, Bryan Vásquez, cuando era entrevistado tras recibir el fajín que lo acreditaba también como monarca.
“Estoy muy orgullosa. Entiendo lo importante que este momento significa para él”, dijo sonriente.
No es cualquier casa donde sus dos moradores son campeones del mundo de boxeo. “Creo que seguimos haciendo historia”. dijo Hanna.