En terreno canalero

Rodolfo Martín

Enviado

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La cena de gala de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), programada para la entrega de los premios anuales a los boxeadores destacados, promotores y entrenadores, tendrá lugar hoy en un hotel de cinco estrellas ubicado frente a la Bahía Balboa.

Y no es para menos. Un evento de esta magnitud reúne a las principales figuras del mundo del boxeo y otras personalidades.

El hotel, además por otros asuntos, guardaba cupo lleno.

Las 186 habitaciones, que tienen costo por noche de $250 hasta $600 en algunas suites, presentaba una condición de ocupación plena.

Los invitados solían pasearse por la parte trasera del hotel que tiene una exuberante vista al mar y, al lado derecho el paisaje a uno de los sectores donde se ubica el mayor desarrollo inmobiliario relacionado con los inmensos condominios habitacionales y de oficinas, la mayoría desocupados.

Igualmente, el lugar tiene al frente una marina donde fondean algunos yates, especialmente para actividad de pesca deportiva.

El Intercontinental Miramar, bullía ayer con la entrada y salida de campeones y excampeones mundiales, entre ellos el japonés Takashi Uchiyama, quien ostenta el título de las 130 libras y que según las reglas de la AMB, debería de exponer sin obstáculo su cetro ante nuestro compatriota que lo tiene de manera interina.

El japones Uchiyama salió a caminar junto con sus dos acompañantes y regresó una media hora más tarde cargando una bolsa con algunos refrescos y galletas.

“Tiquito”, a quien el comité organizador instaló en otro hotel situado en el centro de la ciudad, junto con otros boxeadores, también abandonó el hotel minutos después de haber salido a almorzar.

Bryan salió acompañado por su novia Hanna Gabriels, campeona mundial de las 154 libras, con la intención de comprar unas tenis para poder entrenar.

A la hora de hacer las maletas las olvidó en la habitación.

Ambos lucirán esta noche sus mejores galas según lo adelantaron.