Roma/AP. - El líder Milán se impuso con facilidad ayer 2-0 ante Lecce y aumentó a cuatro puntos la distancia sobre la Juventus, que no pudo pasar de un empate sin goles con Genoa por la Serie A italiana.
Cuando faltan 11 fechas para el término del campeonato, Milán tiene 57 puntos y Juve 53.
En los dos últimos partidos de la jornada futbolística, Bologna derrotó a domicilio 3-1 a la Lazio y Novara ganó 1-0 al Udinese.
Bologna coronó su éxito con goles de Daniele Portonova, Alessandro Diamante y del eslovaco René Krhin. Lazio descontó con un autogol del jugador del Bologna Matteo RubÍn.
Lazio jugó todo el segundo tiempo con un hombre menos por la expulsión del brasileño Matuzalen a los 43 minutos, y el uruguayo Alvaro González corrió la misma suerte a los 56.
Lazio es el tercero en la tabla con 48 puntos y Bologna quedó con 35.
Por otro lado, Novara se impuso 1-0 al Udinese con un gol del brasileño Jedá. Udinese es cuarto, junto al Napoli, con 46.
Milán se adelantó con un gol de Antonio Nocerino a los siete minutos en un ataque iniciado por el brasileño Robinho.
El segundo y definitivo tanto cayó a los 65 por cuenta de un violento derechazo de Zlatan Ibrahimovic desde fuera del área. El artillero sueco es el máximo anotador del campeonato con 19 goles.
Desde el principio del encuentro en el estadio San Siro de Milán el Lecce se refugió en su área.
Mientras los rossoneri buscan revalidar su scudetto, Lecce marcha en el antepenúltimo puesto con 25 puntos y de momento está condenado al descenso. Son tres los equipos que bajarán a la Serie B, trío en el que en estos momentos también se encuentran Novara con 20 y Cesena con 17 unidades.
Lecce logró su objetivo en el primer tiempo y se retiró al descanso con un solo gol en contra, pero en el segundo cambió de actitud y se lanzó al ataque. Sin embargo, el tanto de Ibrahimovic cayó en el mejor momento del Lecce.
Juventus, por su parte, tropezó en un nuevo empate: tiene el récord de 14, que lo han alejado del primer lugar, aunque es el único equipo invicto del campeonato.
La Juve, de visita en la cancha del Genoa, estuvo incluso a punto de iniciar el partido con un gol en contra cuando el atacante argentino Rodrigo Palacio trató de superar con un globito al portero Gianluigi Buffon, quien con un salto felino alcanzó a desviar el balón con la punta de los dedos por encima del travesaño y evitar el gol.
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