Erick Carvajal M.

ecarvajal@aldia.co.cr

Coronado.- Uruguay no quería ser víctima del dicho: “el que perdona pierde”, así que afinó la puntería y le encajó seis a un equipo de Escazuceña que se desfiguró en el segundo tiempo.

Partido intenso, rápido, lleno de emociones. Escazuceña llegó ayer al estadio Labrador con un sistema defensivo, buscando el contragolpe y le funcionó en el primer tiempo, donde logró salir con una ventaja de 1-2.

Sin embargo, en el segundo tiempo las cosas cambiaron. Todos los goles que no metió Uruguay en el primer tiempo los dejó para el segundo.

Johan Condega, jugador de Uruguay, llegó con la pierna encendida. En la primera parte puso el empate a 1, en segundo tiempo el empate a 2 y luego de penal la ventaja para Uruguay,

Cristian Carrillo, de Uruguay, se encargó de meter dos más y Álvaro Astúa le puso el punto y final para la masacre en el Labrador.

“Es una obligación apuntar en casa. Fallé una jugada que era gol pero por dicha me quedó y se la pude servir al compañero”, comentó Carrillo.

Con el triunfo Uruguay llega al cuarto lugar del grupo y su próximo rival será Grecia en el Allen Rigioni.

Johan Condega explicó que será un partido duro en Grecia, pero la idea es traerse los tres puntos y llegar al primer lugar para mantener el objetivo con el que iniciaron el campeonato: subir a la Primera División.