Deportes
Miércoles 25 de julio de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

¿Y si los viejos no se van?....

Amado Hidalgo, periodista

redaccion@aldia.co.cr

La del viernes anterior fue una noche de nostalgia para el fútbol tico. Los saprissistas lloraron por el “Paté”y a los demás se les hizo un nudo en la garganta, no por su partida – que más de uno celebró-, sino porque su adiós de alguna forma fue un último adiós para una legión inolvidable.

Ver reunidos en la cancha a Wilmer, Wanchope, Lonnis, Fonseca, Centeno y demás seleccionados de los Mundiales del 2002 y 2006, fue como echarle sal a la herida de la nostalgia. Nos acosaron esa noche los fantasmas futboleros de mejores tiempos, cuando sobraban líderes y buenos jugadores… Cuando México se arrodilló en su propia cancha bajo los dardos inolvidables de Medford y Fonseca.

Y para colmo de males, esos viejillos fueron capaces de bailarse a una nueva generación morada y el “Paté” agigantó la duda enorme de si su hora realmente le llegó, cuando honró su última cita con la camisa tricolor con un golazo. Añoramos aquellos tiempos de bonanza, y por un momento quisimos que el señor del tiempo nos hiciera el milagro de viajar en reversa, para tenerlos de nuevo en la cancha, aunque solo fuera para enfrentar a este México que hoy nos parece distante. Y no faltó algún iluso que pidió un nuevo examen para las rodillas de Wanchope, una dieta para poner en forma a “La Bala” Gómez, una nueva oportunidad para la pareja López- Centeno, un retorno para el capitán Marín y un sí definitivo de Pinto para Fonseca… Aferrados a aquellos recuerdos y a esas últimas imágenes, el sentimiento de horfandad nos asaltó a todos cuando las luces del estadio se apagaron y el brillo de las viejas estrellas se fue con Centeno y su legión de amigos. Y aunque la criticamos, de alguna forma todos llevamos por instantes una de las camisetas hechas para esa triste despedida: ¿Y ahora quién podrá defendernos?