Ni los Alpes suizos, el desierto del Sahara o las montañas de Colorado son capaces de igualarla.
La edición 20 de La Ruta de los Conquistadores una vez más pondrá a prueba las piernas, el coraje, la condición física y el espíritu de sus participantes.
Muchos la llaman la prueba más dura del mundo en lo que respecta al ciclismo de montaña, pues ninguna tiene tantos obstáculos ni climas tan diversos.
El clima influye
Paolo Montoya, quien corrió en Italia y Federico “Lico” Ramírez, quien triunfó en La Ruta en cinco ocasiones y es uno de los corredores más experimentados del país, aseguran que sin duda la competencia extrema tiene los suficientes argumentos para haberse ganado esa distinción.
“Competí en la Trans Rockies (Canadá) en 2006, que es una prueba por etapas. Pero, por el clima y lo duro del terreno, La Ruta es más difícil”, dijo Montoya.
“Con 19 años gané La Ruta (2004) y después de ello se me abrieron muchas puertas, porque a nivel internacional es una competencia muy reconocida”.
Caminatas infernales
“Lico” sentenció que tras competir en pruebas como el Trans Rockies, TransAlps (Europa) o el Breck Epic (Colorado, (Estados Unidos), La Ruta es la más difícil y complicada por varios aspectos.
“El primer día es muy duro. Si se sale a las 6 a.m. hay que desayunar a las 4 a.m., es algo a lo que el organismo no se acostumbra”, sentenció Federico.
“En las otras carreras que he participado ninguna tiene una caminata tan larga como Carara o el descenso a Turrialba. Sin duda es la más dura”.
Los monarcas
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