Óscar Ramírez, Técnico de Alajuelense

Milton Montenegro

mimontenegro@aldia.co.cr

Óscar Ramírez, técnico de la Liga, aseguró que está tan inmerso en la final, que no tiene tiempo para compartir con su familia.

“Estoy durmiendo espalda con espalda con la mujer. No tengo tiempo para nada, ya cuando esto termine será otra cosa”, dijo Óscar al tiempo que mostraba una enorme sonrisa.

Ramírez afina los últimos detalles, mencionó que prácticamente todo lo tiene listo, pero aún posee un par de dudas.

¿A tan pocas horas del juego, queda algo por definir?

Mañana (hoy) nos queda una sesión de trabajo y quedan cosas pequeñas por preparar, pero siempre son importantes, es algo de lo que hemos practicado, pero lo fundamental es pensar en el partido en sí como base principal.

¿Cuánta tranquilidad le da la opción de poder utilizar a Allen Guevara?

Es un arma más y hay otras, tal vez pueda presentar alguna sorpresita, pero hay que ver cómo evolucionan.

¿Qué tanta convicción hay en el grupo para sacar el tricampeonato ante Herediano?

Yo los veo bien, los veo concentraditos, dando opinión, abonando a la causa, cuando uno hace eso es porque está convencido y quiere.

¿En este instante se concentra más en su equipo, o piensa en lo que ofrecerá Herediano?

Lo normal, tenemos lo nuestro y hay cosas por mejorar. El domingo pasado no dimos en algunos departamentos, me refiero en cuanto a conceptos; otras cosas hay que conservarlas.

¿Con la presencia de Sarvas y quizá Guevara, cuánto puede variar la Liga, respecto al trato del balón y no recurrir en demasía al pelotazo, tal y como hizo el domingo anterior?

El fútbol es de circunstancias, momentos y rivales, por ejemplo en su crónica usted habló mucho del pelotazo y que somos defensivos, siento que el equipo ha tenido buenos partidos y ustedes no lo han reconocido. Hay rivales que condicionan ciertas cosas y en esto yo creo que Jafet es un tipo inteligente. Tal vez sí hubo errores, cosas de nosotros, pero no siempre se juega al pelotazo, no es un estilo, una forma de contrarrestar algo y ustedes a veces lo meten como una constante y no es así.

¿Ha tomado detalle de los juegos en finales y semifinales anteriores ante Herediano, para contrarrestar en este choque del domingo?

Herediano ahora es diferente y las circunstancias son distintas. Hay una evolución en el rival que ha sido trabajada no este año, sino que viene con un grupo constante y en este momento hicieron ciertos acomodos e incursionaron otra gente, y les dio para ser el mejor del torneo. Nosotros venimos ahí tratando de quitar ese favoritismo y lograr el “tri”.

¿Qué significará para usted ser el primer técnico nacional en lograr un tricampeonato al frente de la Liga?

Si se da bienvenido sea, pero lo importante son los muchachos, quienes se han partido la vida. Ha sido un semestre muy complicado y que el equipo esté a un partido de lograr el tricampeonato es un mérito grande, y no se ha hablado nada de eso. Todo lo tenemos adverso, pero el plantel está con la cara al frente y con las ganas de ser el tricampeón.

¿Qué tan importante es anotar primero y hasta rápido en el compromiso?

Siempre, siempre es importante. Si se anota un gol, es una forma para que el equipo se asiente mejor, hay confianza y siempre lo he dicho, es importante empezar ganando, porque iniciar perdiendo te acelera el ritmo y haces cosas que propician errores y el rival puede aprovecharlos.

¿Se siente cansado del semestre de labores?

De año y medio sí, es un acumulado importante de trabajo, pero estamos al pie de lucha. La verdad que quienes mueven esto son los que están en el camerino y mientras ellos no claudiquen, no bajen los brazos y estén con la disposición en que se encuentran, ahí estamos al pie del cañón.

¿Qué es lo que más le perjudica en este momento?

Quizá lo que más me perjudica es no contar con todo el plantel, creo que ha sido para mí una envidia ver a Jafet con toda su gente y yo quedarme un poco disminuido, pero no es excusa. De acuerdo a las circunstancias, mi situación es ver cómo hago para ser tricampeón, de acuerdo a lo que tengo.