Los jugadores heredianos dieron rienda suelta a la alegría una vez alcanzado el título 22.
Óscar Rojas, dijo que regresó al país con la idea de ganar títulos y lo pudo conseguir, con un grupo de mucha calidad.
“Tenía la espinita clavada de ganar títulos. Al que trabaja con humildad, Dios lo premia, peleamos contra todo y contra todos, aquí está el resultado”, expresó.
Cristian Montero se mostró eufórico, luego de tres finales perdidas con el “Team” florense.
“Si algún día me tengo que ir de este club, me voy tranquilo. Son bastantes años de luchar y creo que quitarse 19 años de encima va a ser muy importante para este equipo”, declaró.
Montero recordó que fue un torneo sufrido, sobre todo por los acontecimentos sucedidos esta misma semana.
Pablo Salazar, quien jugó todos los partidos del torneo, también recordó los momentos difíciles que pasaron.
“Somos un equipo luchador, estuvimos contra la adversidad en todo el torneo y Dios nos premia con el título. Esto es un regalo para todos los heredianos, que lo disfruten”.
Uno que lo hizo a lo grande, en la gramilla del Ebal Rodríguez, fue el guardameta suplente, Daniel Cambronero.
“Jugué diez partidos y luego me lesioné y llegó “Leo” que es un gran portero y lo hizo de gran forma. No hay palabras para describir esto, somos un equipo de huevos...”.
El asistente técnico, Mauricio Solís, quien formó parte del Herediano 93 (último título antes del 22), expresó que vivió más el campeonato de ayer.
“Dios me puso aquí y participar de esto es increíble. Anhelaba mucho darle esta alegría a la afición y no pude antes, pero hoy formo parte de este grupo de muchachos”.
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