“Soy saprissista, pero también un profesional y debía cumplir con el trabajo para el que me contrataron”. Así resumió el abogado José Rodolfo Estrada, el papel que desempeñó en el caso de la agresión que sufrió el jugador morado Douglas Sequeira.
Estrada fue el defensor del aficionado liguista de apellidos Hernández Ramírez que le lanzó un reloj a Sequeira el pasado domingo una vez concluyó el clásico en el Morera Soto.
Un hecho que se ventiló y resolvió en los tribunales de justicia.
Ferviente morado
En charla con Al Día, Estrada confesó la particularidad que vivió al abogar por un seguidor del equipo alajuelense.
“Quienes me conocen, saben que soy un gran saprissista y mis familiares más cercanos me han vacilado de porqué un saprissista defiende a un liguista. Lo tomaron de forma jocosa, pero todos entienden que ante todo soy profesional y mi responsabilidad está sobre cualquier color de equipo”, señaló Estrada.
Detalló que inclusive el domingo pasado celebró la victoria 2-1 de la “S” frente a la Liga sin la menor sospecha de que tras ese juego asumiría las riendas de un nuevo caso en su carrera.
Sobre el desenlace, en el que el su cliente no pondrá pie en un estadio durante un año, indicó:
“A mí lo que me dejó satisfecho fue que el agredido se levantó y le dio la mano al agresor en señal de aceptación de la disculpa. Eso no lo paga ni lo que le cobre a la familia del muchacho”, explicó.
Como anécdota recordó que tiene diez años de no visitar un estadio de fútbol “a causa de la violencia”, pero eso no evita que “celebre los goles de Saprissa donde quiera que esté”, concluyó.
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