Deportes
Domingo 22 de julio de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

El jugador atendió a Al Día en sus vacaciones y habló sobre los valores de su carrera futbolística

Gilberto Martínez: “Mi pellejo se queda en la cancha”

Esteban Valverde

esteban.valverde@aldia.co.cr

San Rafael de Alajuela.-Gilberto “Tuma” Martínez parece ser el último caudillo de aquella generación del 2002 que puso el fútbol de Costa Rica en alto, esos que él mismo define como los que dejan el pellejo en el terreno de juego.

El “Tuma” habló con Al Día sobre su actualidad, además de recordar lo que considera es necesario para mantener una larga carrera fuera del país, con valores elementales de vida como: la sencillez y Dios.

“Siempre he dicho que mi pellejo se queda en la cancha, el día que eso no suceda sencillamente me retiro”, comenta.

En esa declaración se denota las tres características que según Martínez tiene desde pequeño, las cuales adquirió en las “mejengas del hachazo”, las cuales disputó en Barrio Uno de Golfito, donde se forjó su carácter.

“Les decíamos el “hachazo” por cosas que sucedieron por ahí, se sabe que el pueblo no se puede olvidar y siempre voy a trotar a la plaza de la zona”, admite entre risas, recordando la época.

Tal vez gracias al barrio, como él le llama a la localidad, es que de todos las temporadas que estuvo en Italia, la primera por lo que logró, es la que siempre recordará.

“Llevaba una ilusión única, una alegría de que se cumple un sueño que se tiene desde niño, ese año significó mucho para mí. El primer recuerdo que nunca voy a olvidar es entrar al camerino y ver a Roberto Baggio, eso valió la mucho la pena”, asegura.

Al pensar en el momento más complicado de su vida, medita al punto que la amargura lo invade y acepta que el no jugar con la Roma lo marcó en demasía.

“Hay una cierta amargura por la lesión, tristeza en el sentido que no pude concretar lo que soñé, luego de consolidarme en el fútbol italiano. Hacer solo una práctica fue una lástima”, agrega.

Y es que el “Tuma” añade que el paso era necesario darlo, sobre todo porque se podía llegar a cansar de Brescia, como sucedió.

“Luego de los primeros cuatro años me quería ir, pero bueno por razones económicas entre clubes no pude dar un paso más allá, ellos pedían cifras exageradas, quedé siempre con ese clavito que pude hacer mejor las cosas”.

Curiosamente la principal satisfacción de Martínez en su carrera va más allá de los alcances deportivos. “Creo que jugué ante grandes futbolistas, además tuve un cambio de vida espiritual, es mi logro personal. Las alegrías de este mundo son pasajeras, uno tiene que trabajar mucho para el Señor”, valora.

Con 32 años, una de las principales deudas que tiene Martínez es anotar de nuevo, y si puede salir campeón nacional, dos metas que no ha podido lograr.

“Son más que todo para satisfacción personal, porque yo he visto muchos campeones pero que después no tienen ni que comer, aunque obviamente es algo bonito”.

Sobre el gol la expresión entre risas, “qué tristeza”, resume el sentir de Gilberto, a pesar de que menciona que no es su prioridad y el que hizo en 2004 en la Serie A lo tiene más que contento.

“La verdad es que con uno creo que me sobró y me bastó, pero vamos a ver que pasa en lo queda”.

Así es el “Tuma” de la actualidad, el cual no ha cambiado en esencia, pero sí en empaque, teniendo a Dios como su principal eje de vida.

Así los ve el “Tuma”

Totti
Totti

Franchesco Totti: “es de los jugadores más sencillos, humildes con los que me tocó compartir, él es una persona que no parece pero le gusta compartir y hacer bromas, además de ser un gran jugador, de sobradas condiciones”

Daniel Casas: “es un gran entrenador, y tiene una gran responsabilidad, ya que el Saprissa está urgido de campeonatos, ojalá y pueda armar un equipo importante para alcanzar los objetivos”.

Guimaraes: “es un entrenador que le gusta vivir el fútbol, le gusta estudiar el deporte y eso se nota en cada entrenamiento, es un buen técnico, pero sobre todo una gran persona”.

Centeno: “es una excelente persona, un jugador de grandes condiciones y un gran líder dentro y fuera del terreno de juego, eso quedó demostrado con la Selección y el Saprissa”.

Josep Guardiola: “es un hombre muy serio, muy profesional, se notaba que iba a ser entrenador desde que era compañero mío en Brescia, trabajaba de una manera muy profesional, entregado al máximo”.

Saprissa: “como se dice, soy morado de corazón, aprecio esa institución demasiado, y aunque en mis primeros años estuve poco tiempo, tengo que decir que es un equipo que marca y además para el jugador que viste esa camisa es como una segunda casa”.