Deportes
Jueves 13 de octubre de 2011, Costa Rica
Pasión por el deporte

Afición elige a Marco Antonio Rojas el mejor portero en la historia del Saprissa

El primero del arco morado

Kenneth Hernández Cerdas

kenneth.hernandez@aldia.co.cr

En la década de los sesenta, antes de debutar en primera división, Marco Antonio Rojas hacía de juntabolas en los partidos en los que la “S” era local.

Justo al frente suyo estaba Mario “Flaco” Pérez, el arquero que tenía amarrada la titularidad en el equipo capitalino.

Ver al “Flaco” atajar inspiró a Rojas, quien para la década siguiente ya no recogía pelotas, sino las bloqueaba debajo de los tres tubos saprissistas.

“Marquitos”, como le llamaban sus allegados, firmó una carrera exitosa en el Saprissa club con el que jugó de 1972 a 1987.

Hoy, en pleno 2011, la afición lo distingue como el mejor portero en la historia de ese equipo, según una escuesta realizada en el sitio www.aldia.cr.

Un sondeo el que no sólo superó a Pérez sino a otros notables cuidapalos como Rodolfo “Cholo” Sanabria, Felipe Induni, Juan Gutiérrez, Rodolfo “Largo” Umañana, Miguel Segura y a figuras recientes, Erick Lonis, José Francisco Porras y Keilor Navas.

“Para mí es un orgullo y un privilegio que la gente me ubiqué así. Y más porque me ponen a la par de tan excelentes arqueros”, declaró Rojas a Al Día, tras enterarse de la elección.

Y añadió que “en Costa Rica siempre hubo buenos arqueros pero últimamente a pesar de que entrenan más, están fallando, sueltan mucho la bola y muestran defectos que los de nuestra época no teníamos”.

Volaba de un palo a otro

Rojas dejó huella, se convirtió en figura dentro y fuera el campo. Al margen del césped era un “galán”, llegaba al estadio impecablemente vestido, usualmente de traje formal, detalle que lo convertió en uno de los futbolistas de moda en los setenta y parte de los ochenta.

Mientras, en la cancha aquel porte de “playboy” lo cambiaba por elasticidad y seguridad.

El libro Historia del Deportivo Saprissa escrito por el periodista e historiador, José A.Pastor, retrata lo que era Marco Antonio en el terreno de juego.

“Volaba de palo a palo con un control impecable de sus movimientos”.

Fue así como formó parte del hasta hoy irrepetible hexacampeonato del Saprissa (1972-1977).

Su desempeño no sólo lo ubicó en un pedestal para los morados de la época, sino que lo lanzó directo a la Selección Mayor, con la que disputó tres eliminatorias mundialistas y los Juegos Olímpicos Los Ángeles 1984.

En dicha Olimpiada participó de la sonada victoria 1-0 sobre Italia, con gol de Enrique Rivers.

Estadísticas Cristian Sandoval/Fotos.José A.Pástor