El otro costarricense que está en tierras japonesas, en el Gainare Tottori, es el defensor Roy Smith, quien asegura que es el que pone la alegría en el camerino de la escuadra.

“Ya me identifico más con algunos compañeros y vacilamos a pura seña. Uno pone reggae y se empiezan a reír, yo soy el maestro de baile”, comentó Smith.

Roy fue claro que aunque no ha logrado conseguir la regularidad en el once titular, se siente tranquilo ya que se entrega al máximo y solo espera la oportunidad.

“La verdad me ha ido muy bien gracias a Dios, hago el trabajo normal y sigo trabajando como profesional que soy, respeto las decisiones del entrenador”, manifestó.

El exjugador de Brujas añadió que su juventud independiente hace que su adaptación a otro país sea sencilla. “Yo desde los 14 dejé mi familia atrás, entonces me he ido acostumbrando a vivir solo, igual uno extraña y demás, pero no quiero devolverme. Yo me cocino, y paso metido en el Facebook”, agregó.

Para Smith, Cunningham representa su principal apoyo en tierras niponas.