Deportes
Domingo 15 de enero de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

Opinión

Hanna vapulea todos los prejuicios

Antonio Alfaro

Editor

analfaro@aldia.co.cr

El juego estaba en pausa, de esas normales en el tenis entre una jugada y el saque, cuando un murmullo sin sentido se abrió paso en la final de la Copa del Café. La noticia empezó a correr entre los aficionados, de amigo a amigo, de aficionada a desconocido. “¡Ganó Hanna!”. ¡Y pensar que cualquier prejuicioso hubiese creído indiferentes a los amantes del tenis ante los guantazos de “la negra”.

A este mortal, entre ellos, arrepentido muy tarde de no haber recordado la pelea cuando compró las entradas a la Copa (de muy buen nivel, por cierto), no le quedó más que seguirla por mensajes al celular, enviados round a round por un familiar.

Mensaje 1: Ya empezó.

Mensaje 2: Primer round Hanna mejor.

Salir y regresar a casa ya no era opción. Quedaría sin el santo y sin la limosna: no llegaría a tiempo al último round por más que se extendiera la pelea y me perdería el set definitivo entre Noah Rubin y Connor Farren, dos talentosos estadounidenses.

Mensaje 3: Segundo round Hanna ‘güena’.

Mensaje 4: Tercero tranquilo.

Mensaje 5: Cuarto round tome deme, pero Hanna mejor.

Con la expectativa dividida entre un “slice” y un golpe de revés, la espera de cada mensaje parecía tardarse demasiado, eternos tres minutos por cada round.

Mensaje 6: Quinto Hanna ‘güenísima’ Dakota con sangre en la nariz.

Mensaje 7: Sexto Dakota ojo derecho casi cerrado.

Mensaje 8 : Sétimo Dakota golpeó un poco más.

Mensaje 9: Nocaut de Hanna, el árbitro lo dictó porque la chavala estaba muy golpeada, pero la vieja estaba reclamando que no.

No la vi, no lo sé, pero tengo claro que Hanna noquea hasta prejuicios, pone al borde de la silla a la familia, al padre, al joven, a la señora que hace diez años hubiese dicho el boxeo no es de mujeres.