Deportes
Jueves 19 de abril de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

Cornada norteña en el Morera Soto

Tanto nadar para morir en la orilla

Hermes Solano

Redactor

hermes.solano@aldia.co.cr

Alajuela. - Alajuelense tenía la “papa en la mano”, le “costó” seis victorias consecutivas y nueve juegos sin perder meterse en zona de clasificación, y en 90 minutos la ilusión de las semifinales se fue por la borda.

Nadó contra corriente, dejó atrás las olas fuertes, supo superar tormentas en Heredia y en Tibás, pero a pesar de nadar y nadar, murió en la orilla.

Eso fue lo que le pasó también en el juego de anoche. San Carlos se puso al frente en el marcador, fue dueño del juego en la inicial, la Liga se quedó con 10 hombres por la expulsión de Cristopher Meneses y remó contra todo en el complemento para llegar al empate y cuando buscaba el segundo, lo liquidó Verny Scott, quien se puso el traje de verdugo y le cortó la cabeza a un León que esta vez no rugió y se fue a casa con la cabeza abajo por fallar cuando no debía.

Todo el mundo habló del último juego en Pérez Zeledón y lo difícil que sería para los manudos pensando en lograr el boleto; nadie habló de San Carlos y los “Toros” recordaron que son la “bestia negra” liguista en los últimos años. Lo volvió a poner en cuidados intensivos y apenas con menos de medio tanque de oxígeno.

La clasificación ahora depende de un milagro. Necesita un triunfo en San Isidro de El General y de que salgan derrotados Cartaginés y Herediano el próximo domingo.

Lo decía Óscar Ramírez el domingo tras vencer a Limón, “no podemos relajarnos porque una derrota ante San Carlos tira todo al basurero”. Hoy la Liga botó a la basura todo el esfuerzo hecho en la segunda vuelta del certamen.

Falló de nuevo

Fue el peor Alajuelense de los últimos encuentros, un equipo que se vio ansioso, sin confianza con la pelota y que fue presa fácil de un San Carlos que llegó a hacer el partido del torneo, que lo presionó, le jugó de tú a tú y que desnudó los fantasmas del equipo erizo de la primera vuelta.

No pusieron la pelota al piso, no encontraron libertades, jugaron más con el corazón que con la razón y el adiós parece pronto.

El tricampeón se volvió a quedar sin aire, apenas y respira de cara al cierre de la primera fase.

“Queda un cartucho”, dice el “Machillo” Ramírez, pero ya las “semis” se ven muy lejanas.