Hoy hay que bajar todos los santos. A las 11:30 de la mañana hay que rezarle a “La Negrita”. A esa hora el país se debe paralizar y estar pendiente de Nery Brenes, nuestro atleta de oro, el trapito de dominguear del deporte tico.
En Estambul, Turquía, Brenes competirá en la final de los 400 metros lisos del Campeonato Mundial de Atletismo bajo techo. Es la tercera ocasión en que el tico llega a una final.
Lo consiguió en Valencia 2008 y en Doha 2010, en ambas terminó en cuarto lugar.
Pero hoy, puede hacerse realidad aquello de que a la tercera es la vencida.
Nery no solo clasificó con su mejor tiempo en una competencia bajo techo, 46:01, sino que consiguió el tercer mejor tiempo de todos los que avanzaron a la gran final.
El nacional, quien correrá en el carril seis, se ubicó detrás de Demetrius Pinder de Bahamas, quien hizo 45:94 y detuvo el cronómetro en el mismo registro que hizo Tabarie Henry de Islas Vírgenes.
“Yo estoy preparado para correr contra quien sea y eso vamos a hacer”, dijo Brenes desde Turquía y si él lo dice hay que creerle, porque el objetivo que se traza lo consigue. El atleta limonense tiene muchas opciones para ganar una medalla, ojalá sea de oro. En octubre del año pasado, Nery le dio una enorme alegría al país, con tiempo de 44:65 ganó la final de los 400 metros planos en pista al descubierto y le dio a Costa Rica la primera medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara.
Brenes tiene sed de revancha, luego de su caída en la competencia en Inglaterra, donde iba en el primer lugar.
Hoy se puede desquitar y ratificar que está dentro de la élite mundial. Hoy puede empezar a hacer realidad su gran sueño, lo que pregona cada vez que puede: ser el número uno del Mundo. ¡Vamos Nery! ¡La tercera es la vencida!
