La Sabana. - Cuando Richard Smith se convirtió en figura en aquel ya lejano 2-0 sobre el México de Menotti en 1992, Joel Campbell tenía cinco meses de nacido. Veinte años después la esperanza de muchos para volver a vencer a los aztecas en casa era el jugador del Betis de España, pero no. Juego sin pena ni gloria para Campbell y para toda la Selección.
México vino al Nacional, hizo lo que quiso con la pelota y se llevó los tres puntos. Así de fácil.
La “Pantera” seguirá siendo noticia, por un buen rato más, cada vez que los norteamericanos vengan a jugar al país.
Carlos Salcido y Jesús Zavala hincaron a la “Sele”, algo que podría no sorprender a nadie, aunque todos pensaron en milagro.
Hay que ser claros, para ganarle a un equipo como México no solo basta tener ganas, se necesita mucho más que eso. Costa Rica las tuvo ayer, por lo menos en el arranque del juego. Se vio emocional y eso es bueno, pero se tiene que complementar con tener el balón en los pies, crear peligro, jugar por las bandas y no solo tirar el pelotazo a ver qué sale.
Tampoco podemos rezarle a Dios para que Campbell llegue iluminado y resuelva todo.
No, se necesita jugar, presionar, quitarse el miedo, atreverse, por más superior que sea el rival, no hay que dejarlo que se sienta como en casa.
Eso pasó anoche en el Nacional y el partido acabó como las últimas cuatro visitas aztecas; sin victoria Tricolor.
Derrota dolorosa, tan dolorosa como el 2-1 del 2005, con el mismo Jorge Luis Pinto en el banquillo, o el 3-0 en 2009.
La de anoche deja sensaciones de frustración, aunque tampoco significa el adiós a las posibilidades de estar en la hexagonal.
Gracias a Guyana, que contra todo pronóstico le empató 2-2 a El Salvador en el Cuscatlán y nos dejó todavía en el segundo sitio del grupo.
Hay que ser claros, México es superior, no hay nada que hacer, es la realidad y aunque cuesta aceptarla, es así.
Lo dicen los resultados, el fútbol, el juego, los logros...
El boleto tico se define ante los salvadoreños, de visita. Ahí vivimos o morimos, tomando en cuenta que acá se le ganará a los caribeños. Por lo menos eso diría la lógica, pero...
¡Ah y no sólo Smith seguirá figurando! Los del 2001 también.
