Alajuela. - Para él fue un partido especial. Jugó contra el equipo donde hizo liga menor, en una ciudad donde vivió muchos años y además, logró compartir con varios familiares que no había visto en cierto tiempo.
Pero también, Pablo Gabas, capitán de Alajuelense, compartió con la figura de Newell’s, Maxi Rodríguez, a quien conocía de sus años como adolescente.
El argentino naturalizado costarricense, contó previo al juego que vivió cerca de donde Maxi y además, compartían en el microbus que los trasladaba a los campos de entrenamiento.
Según Gabas, Maxi lo recordó y tuvieron tiempo para hablar.
“Sí, estuvimos hablando un rato, de amigos y de la familia y me dijo que en cualquier momento, si estaba la posibilidad se da la vuelta por Costa Rica para venir a conocer. Le han hablado bien del país. Ahí cambiamos los teléfonos”, aseguró el volante, quien eso sí, no pudo intercambiar la camiseta con el 11 “leproso”.
“No, la camiseta quedó de lado”, manifestó el manudo.
La mejor prueba
Ya en el plano deportivo, para el capitán erizo el encuentro del sábado en Argentina fue el mejor simulacro de lo que se pueden encontrar en la Concacaf Liga Campeones ante el Tigres de México, tanto acá en el Morera Soto, como en suelo azteca.
“Una experiencia linda, un fútbol de alto nivel que nos deja muchas enseñanzas porque nos hace ver lo que podrían ser los partidos en Concacaf”, asegura, mostrándose satisfecho por lo hecho en el campo, principalmente en 70 minutos de partido, donde con el marcador 0-0 demostraban estar bien parados.
“Se hizo para mí más cosas buenas que malas”, asegura.
Ahora, Gabas y compañía esperan estar listos para Belén.
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