Costa Rica tiene calidad deportiva, pero falta creer en los atletas

Bryan Ruiz

Futbolista

El mismo orgullo que me dicen sentir gran cantidad de aficionados cuando me ven jugando en Inglaterra, sentí yo cuando vi esta semana al ciclista Andrey Amador ganando una etapa en el Giro a Italia y a Warner Rojas subir el monte Everest.

También sentí mucha admiración hacia la futbolista Shirley Cruz, cuando la semana pasada campeonizó con su equipo, el Olympique de Lyon en la Champions League femenina.

Junto a estos deportistas tenemos a tres campeones mundiales que todos ya conocemos, como lo son Nery Brenes en atletismo, Hanna Gabriels y “Bryan Tiquito” Vásquez en boxeo.

Al ver los grandes resultados de todos ellos, ¿cómo vamos a dudar del talento que tenemos los costarricenses en el deporte? Lo que pasa es que no creemos que tengamos las condiciones para sobresalir a nivel internacional.

Los ticos tenemos que confiar en el deportista costarricense, el Gobierno y la empresa privada tienen que meterse más a respaldar las distintas disciplinas para que venga el éxito, porque un deportista sin apoyo no tiene cómo llegar lejos.

Me pregunto ¿cuántos atletas se pierden de los Juegos Nacionales porque no tienen condiciones económicas para explotar su talento? Estoy seguro que es mucho el talento que se desperdicia.

Yo creo que para la empresa privada sería interesante y beneficioso darles seguimiento a esos jóvenes atletas, reclutarlos, prepararlos y así ganará el país en triunfos; la empresa obtendrá gran imagen y el atleta verá cumplido un sueño.

Todos ganamos.

¿Cuántos ciclistas tendrán las condiciones de Andrey Amador?, o cuantos jóvenes tienen la velocidad de Nery, pero el esfuerzo no les alcanza.

Costa Rica es un país pequeño, pero tenemos gran talento, estamos a tiempo de preparar de la mejor manera a los atletas que participarán en las Olimpiadas del 2012 que se desarrollarán en Londres, ellos se merecen una participación digna, por eso hay que impulsar sus fogueos porque competirán al más alto nivel y necesitan llegar así, como deportistas de alto nivel.