Londres. - Quería llegar en el pelotón de los favoritos. Y lo hizo. Quería rondar la posición 30. Y lo hizo. Pero nunca sabremos qué hubiera pasado si Andrey tomaba esa fuga que no tomó.
Él lo lamenta un poco. Apostó todo a que el grupo de los favoritos controlaría la carrera, se quedó con ellos más de lo que hubiese querido, se negó a fugas que pensó no pegarían y cuando se dio cuenta del error, era muy tarde.
- Después de bañarse, comer y descansar un poco, ¿cómo analiza la carrera?
Fue bastante dura, 250 kilómetros y creo que no estoy triste, pero tampoco contento. Creo que el resultado hubiera podido ser un poco mejor, pero es lo que hay.
- Si fuera por la posición 35 uno quedaría satisfecho, pues por ahí andaban sus pretensiones, pero queda el saborcito de que se podía más.
Sí, creo que tenía que estar en el grupo de los 20 escapados, dudé un poco del momento, que fue cuando estaba bien, de fuerzas estaba muy bien, llegué muy entero y me confié en las selecciones como la de Cavendish, de Gran Bretaña, Alemania con Greipel, que eran los claros favoritos. Me mantuve a que íbamos a llegar a un ‘sprint’ y no quería mal gastar fuerza porque tenía decidido entrar al sprint. Lo importante es que dije que iba a llegar muy bien preparado y llegué y también dije que en estas carreras de un día son una lotería y lo fue. Hubo muchas sorpresas.
- Si la carrera se volviera a presentar, ¿qué haría usted ?
En el momento en que se empezó a ir el grupo de 20, que de hecho estuve con un par de corredores que estuvieron en ese grupo, hubiera ido con ellos, pero no vi necesario malgastar fuerza. Volví a ver para atrás y vi que venía el pelotón bastante cerca con la selección de Gran Bretaña y decidí unirme a ellos, parar ir un poco y esperarme atrás porque esperaba que después pudiéramos alcanzarlos y no fue así. Nadie hubiera apostado por el resultado que se dio.
- ¿Qué le pasó a Cavendish y Wiggins?
Creo que ellos pensaron que íbamos a alcanzar la fuga, de que otras selecciones iban a entrar en la colaboración, pero en este caso no fue así, les dejaron toda la responsabilidad y no tuvieron la suficiente fuerza.
- ¿Exceso de confianza de las figuras?
Sí, fue un error, circunstancias de carrera, si esto fuera todo establecido, no sería deporte. En este caso ellos fallaron como un montón de veces han acertado.
- ¿En qué momento usted dijo “¡Qué torta! ¡Me embarqué!”?
Hacia el final de la última vuelta (a falta de 50 kilómetros). Es el momento de aprender. Así como otras veces he tomado buenas decisiones, en este caso fallé y lo bueno es reconocerlo. Lo bonito del ciclismo es que no es como otros deportes que prácticamente solo tienen la Olimpiada; en el caso de nosotros tenemos más calendario. Lo importante es aprovecharlo, creo que me encuentro en excelente nivel y lo importante es demostrarlo en las carreras que vienen.
- ¿Qué le dice a la gente en Costa Rica?
La verdad muy contento. Agradecerles por el apoyo que me dan, pero esto no es fácil.
Bonilla quedó satisfecho
“Fue una carrera excelente de Andrey”, considera José Adrián Bonilla, quien fungió como técnico del pedalista.
Ingresar a la meta con el pelotón de quienes eran los favoritos y terminar en la posición 35 hacen de esta una misión cumplida, a criterio del exciclista. Más no se pudo, según considera él.
“Queríamos que él agarrara la fuga buena, pero era difícil, al estar él solo (sin equipo)”, señala Bonilla. “Ojalá que en un futuro podamos asistir con más representantes, porque hacerlo solo es una cacería”.
Recién finalizada la carrera, José Adrián no consideraba un error de estrategia que Andrey se negara a intentar una fuga y en su lugar se quedara con los favoritos.
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