Hoy en el voleibol

Londres / AP.- Todo padre se siente orgulloso de su hijo cuando compite en una olimpiada. Pero, ¿qué pasa si el hijo defiende un equipo y el padre otro?

“Es una celebración, un regalo de la vida el poder ser parte de esto”, dice Jon Uriarte, técnico de Australia, cuyo hijo Nicolás, integra la selección de Argentina.

Australia y Argentina se medirán hoy en sus debuts en el torneo olímpico de voleibol.

Lejos de considerarlo algo dramático, Jon Uriarte cree que el poder verse las caras en un torneo como las olimpiadas es algo digno de celebrar. “Yo y mi hijo... Es una linda historia para el deporte en general, no solo el voleibol”.

Uriarte jugó 11 años en la selección argentina y ganó la medalla de bronce de los Juegos de Seúl en 1988. Esta es su segunda gestión al frente de Australia. Primero lo contrataron en el 2001 y ayudó a que Australia se clasificara a los juegos de Atenas. Ahora volvieron a llamarlo en el 2011.

También dirigió a Argentina, lo que podría ser una ventaja hoy, ya que conoce bien a sus rivales. Empezando por su propio hijo.

Nicolás Uriarte es una joven promesa de 22 años que fue elegido el jugador más valioso del mundial junior del 2009.

“Será un tanto extraño, muy emocionante. Mi familia estará apoyando a Argentina, obviamente, pero nos alentarán a los dos. Hablo con mi padre, aunque no de los equipos, y nos reímos un poco de todo esto”, dijo el joven.

No son los únicos

En Brasil el técnico Bernardo Rezende, o Bernardinho, dirige a su hijo Bruno Rezende, es armador, igual que Nicolás Uriarte.

Pero ambos tiran para el mismo lado. Los dos Rezende estuvieron también en Beijing, donde Brasil se llevó la plata.